Nunca existió una Arcadia feliz.
No es poca la gente –incluso gente muy joven– que sustenta la idea de que existió un tiempo en el pasado donde la gente vivía felizmente, hasta libremente, en una especie de mundo bucólico y sencillo sin las preocupaciones, presiones y condicionantes del presente. Unos pocos (cada vez menos) siguen creyendo que todo tiempo pasado fue mejor, mientras otros consideran que en algún punto de nuestra historia existió una época dorada, un paraíso terrenal estropeado por nosotros mismos, por nuestra codicia, nuestra cerrazón o nuestra maldad. Algunos aprovechan para arrimar el ascua a su sardina política, tratando de asimilar ese periodo arcádico a algún momento del pasado en que sus ideas eran dominantes; la mayoría, se limitan a referirse a él como un modelo ideal hacia donde deberíamos caminar, pero no lo hacemos por ambición, ceguera y orgullo.
Disiento profundamente de todos ellos. Más allá de vanos idealismos, el pasado era un lugar donde ni tú ni yo querríamos permanecer más de una semana, en plan turista temporal, ni por asomo. Ni por broma, vamos. El pasado era un lugar horrible para vivir, un tiempo de mugre, piojos, dolor de muelas, tiranía, superstición, ignorancia, plagas, niños muertos y mamás adolescentes muertas con ellos. El pasado era una mierda.
Vidas breves.
Hasta la llegada de la medicina moderna, la tasa de mortalidad infantil en todo el mundo oscilaba entre el 20% y el 30%, llegando al 40% en épocas de hambruna, guerra o plaga. Estas cifras se mantuvieron así hasta entrado el siglo XX en lugares de orden social tradicional donde la ciencia médica tardó en penetrar. Las causas más frecuentes eran las infecciones otorrinolaringológicas, la difteria, el sarampión, la viruela y la rubéola, con ayuda de la anemia. Me gustaría que reflexionaras un instante sobre esta cifra. Uno de cada cinco niños nacidos vivos no llegaba a la adolescencia en el mejor de los casos, y normalmente uno de cada tres. Esta es una cifra peor que la del peor infierno del Tercer Mundo presente, donde al menos llega algo de penicilina y algunas vacunas de vez en cuando.
Vamos a expresarlo gráficamente. Toma una hoja de papel y escribe en ella los nombres de diez niños que conozcas. Ahora tacha dos. O tres. O hasta cuatro, en un año malo. Ese era el riesgo de nacer hasta aproximadamente la segunda mitad del siglo XIX en el mundo más desarrollado, y mediados del XX en el resto. Un motivo central de la tendencia a tener muchos hijos presente en todas las culturas es que al menos un porcentaje de ellos sobrevivieran para mantenerte cuando fueras viejo, antes de que existieran las pensiones de la Seguridad Social.
Si lograbas sobrevivir a estas tasas de mortalidad infantil, causadas por la poca diversidad y seguridad alimentaria, la falta de higiene y asepsia y la ausencia de antibióticos y vacunas, entonces era posible que llegaras a vivir hasta los 60 o 70 años; incluso, en algunos casos, hasta avanzada edad. Pero si eras chica, tus probabilidades de que tal cosa sucediera sufrían un nuevo hachazo: las probabilidades de morir en el parto oscilaban entre el 1% y el 40%, normalmente de hemorragia, obstrucción o fiebre puerperal, cuando no de aborto casero. Esto es, a partir de los 12 o 13 años, en cuanto llegaba la pubertad, porque eso de empezar a reproducirse con 18 o más años es otra modernez, una excepción en la historia humana que habría hecho mearse de risa a nuestros antepasados. Menudas viejas, dirían.
Hablando de chicas, el pasado fue un mal momento para nacer con una raja entre las piernas. Ya te digo yo que esas idílicas sociedades matriarcales bajo la tutela de la diosa Gaia que pretenden algunas (y algunos) jamás existieron. En las menos patriarcales y machistas de todas, a lo mejor que podías aspirar era a pudrirte a la misma velocidad que tus hermanos, pero además, pariendo hijos. Lo más normal es que fueses alguna clase de propiedad de los hombres de tu familia, en distintos grados de sumisión. No hay ningún indicio de que las amazonas fuesen mucho más que una fantasía erótica de los escritores griegos, inspirada en mujeres guerreras –de eso siempre ha habido en mayor o menor medida–, pero jamás hubo ninguna sociedad amazónica. Y la diosa esa tan enrollada, según donde te pillase, igual esperaba que le sacrificases algún hijo. O hija.
Si sobrevivías a la infancia y no te mataba la guerra o la peste o la fiebre puerperal o cualquier mal aire, es posible que vivieras un buen puñado de años. Cómo los vivirías es otra cuestión.
Piojos, malaria, tos sangrienta y dolor de muelas.
Se oye con frecuencia que la caries es una enfermedad de la civilización, vinculada a las dietas que asumimos cuando inventamos la agricultura y nos sedentarizamos. Es cierto que la agricultura y la sedentarización, aunque dieron lugar a las civilizaciones, fueron una muy mala idea para quienes las padecieron: la esperanza de vida media de 33 años que habíamos gozado cuando éramos nómadas, en el Paleolítico Superior, colapsó a menos de 30, más bien 25 o 28 y a veces 18, como en la Edad del Bronce. Es incluso probable que las poblaciones nómadas tuvieran que ser sometidas y sedentarizadas por la fuerza, como siervos o esclavos agrícolas, a manos de los aspirantes a convertirse en reyes y emperadores. Otros creen que el proceso pudo ser más voluntario, cambiando una mayor seguridad en el suministro alimentario por un empobrecimiento se su variedad y una menor esperanza de vida. Ocurriera como ocurriese, hacinarse en esas marismas insanas que llamamos tierras fértiles empeoró la mortalidad y la calidad de vida de casi todo el mundo, hasta aproximadamente el siglo XX.
Pese a ello, la caries no es estrictamente una enfermedad de la civilización relacionada con esta menor variedad alimentaria de las comunidades sedentarizadas, como se ha dicho muchas veces. Y no lo es porque está presente en numerosos cráneos recuperados de periodos anteriores, como el Paleolítico; incluso se ha encontrado en dientes del neandertal. Sin embargo, su incidencia era mucho menor. La caries, ciertamente, se multiplicó y agravó enormemente durante el Neolítico, con la agricultura y la sedentarización.Y nadie sabía cómo combatirlas, porque para comprender la necesidad de la higiene bucal (en realidad, de cualquier clase de higiene) hay que comprender primero la teoría de los gérmenes. La única posibilidad era arrancar el diente, pero quedarse desdentado en aquellos tiempos tampoco era una idea muy buena, así que muchas veces se retrasaba hasta que dejaba de doler, conduciendo a infecciones maxilares mucho más severas. La historia de la humandidad es una historia de gente desdentada, con constantes dolores de muelas y graves abscesos faciales, a la que el aliento le olía peor que una alcantarilla. Sin analgésicos, ni antibióticos, ni nada parecido a la cirugía dental y maxilofacial contemporánea.
Nómadas o sedentarios, los piojos vienen acompañándonos desde que surgimos, y despiojarse mutuamente ha sido una de las actividades familiares y sociales más corrientes hasta el surgimiento de los actuales tratamientos quimicos. La familia que se despioja unida permanece unida, o algo así. El caso es que hemos vivido siempre comidos por los piojos, al menos en los lugares con pelo abundante; llamamos ladillas a los que se dan en el vello púbico. Para terminar de arreglarlo, la invención de la ropa permitió la evolución y especialización de una tercera clase de estos parásitos, el piojo corporal, que se nos come de cuello a pies. A diferencia de los dos primeros, incapaces de transmitir ninguna enfermedad en particular más que las molestias cutáneas asociadas a su presencia (picor, irritación, con consecuencia de insomnio y debilidad), este último es un vector conocido del tifus, la fiebre de las trincheras y la borreliosis. Las pieles y ropas resultaron ser un gran avance para... las epidemias.
Otra consecuencia perversa de la sedentarización fue el surgimiento de la tuberculosis, en este caso gracias a un bacilo frecuente en la ganadería. Probablemente se trate de la primera enfermedad de que tuvimos consciencia como un estado específico: en Egipto ya tenían hospitales especializados en su tratamiento allá por el 1.500 a.C. Con dudoso éxito, pues parece que tanto el faraón Akenatón como su esposa Nefertiti murieron por causa de la tisis, su nombre tradicional en castellano; si unos emperadores considerados como dioses morían así, puede imaginarse lo que esperaba al pueblo llano. En la India, los brahmanes tenían prohibido casarse con ninguna mujer cuya familia tuviera un historial de tuberculosis, lo que tampoco resultaba muy eficaz. En Europa, el tratamiento más avanzado consistía en una imposición de las manos del rey, con el resultado que cabe suponer. Paracelso, en otra de sus chaladuras –el mérito de Paracelso no está en lo que creó, sino en lo que destruyó: las supercherías aún mayores de su antepasado Galeno, el de las sangrías–, opinaba que la tuberculosis se debía a algún órgano incapaz de cumplir adecuadamente sus funciones alquímicas, ni más ni menos. Durante el siglo XIX, la llamada Peste Blanca se comía a las jovencitas y no pocos jovencitos y no tan jovencitos por millones, dando lugar a uno de los temas más característicos en el Romanticismo. Tuvo que venir Robert Koch a decirnos que se trataba de un microbio, y únicamente entonces fuimos capaces de combatirla.
La malaria es otra vieja compañera, sólo recientemente erradicada en los países desarrollados, vinculada también a las aguas estancadas y sus mosquitos, los campos de cultivo y la sedentarización. En la Roma clásica, la malaria, la tuberculosis, el tifus y la gastroenteritis se ventilaba cada año a unos 30.000 ciudadanos en los meses enfermizos de julio a octubre. Por no mencionar la tiña (foto de la derecha) u otros males comunes (e incurables) en su tiempo, incluyendo, por supuesto, las enfermedades venéreas de la Antigüedad, que ya te puedes imaginar cómo iba el tema.
Las alternativas para nuestros antepasados eran simples. O permanecer como nómadas cazadores-recolectores, atrapados en el primitivismo Paleolítico y cada vez más rechazados y expulsados por las comunidades sedentarizadas, o sumarse a la sedentarización total o parcialmente, convirtiéndose en súbditos, cuando no siervos y esclavos, de las civilizaciones agrícolas y ganaderas en ascenso.
Inseguridad alimentaria.
Por otra parte, ni nómadas ni sedentarizados tenían garantía alguna sobre la seguridad de su comida y su agua. Las comunidades nómadas eran pequeñas y dispersas porque dependían de lo que la tierra quisiera dar, imposibilitadas para evolucionar y desarrollarse. Las comunidades sedentarias no sólo produjeron durante largo tiempo comida abundante pero poco variada y de ínfima calidad, sino que estaban sometidos a toda clase de plagas y putrefacciones. Esas estupendas mazorcas de maíz, ese trigo perfectamente seguro o esa carne con garantías veterinarias son el resultado de generación sobre generación de hibridaciones, cultivo selectivo y progresos en las ciencias agropecuarias y médicas. En el pasado tenían que apañarse con cosas más parecidas al farro, la escaña y la cebada, que son básicamente un asco como alimentos (cuando no lo que ahora llamamos mala hierba), y con carnes y pescados obtenidos y conservados de maneras realmente creativas. En la imagen puedes ver cómo era el trigo antiguo (derecha) en comparación con el moderno (centro e izquierda).
Hoy en día nos quejamos de que a la comida y al agua le echan cosas y de que es todo artificial. Lamentablemente, las alternativas son el cólera, la gastroenteritis, el carbunco (ántrax), la triquinosis, la salmonelosis, la listeriosis, el botulismo, el síndrome de Guillain-Barré, la gangrena gaseosa, la hepatitis, la diarrea mataniños y otras delicias por el estilo que en el pasado constituían una permanente ruleta rusa. Las epidemias de los cultivos y el ganado no sólo los mataban, provocando constantes hambrunas, sino que incluso cuando no los mataban podían contaminarlos de manera invisible para un mundo sin microscopios. Son especialmente curiosos los casos de ergotismo, un hongo de los cereales con efectos muy parecidos al LSD, que además pasa a los bebés mediante la leche materna.
La potabilidad del agua merece párrafo aparte. Antes de que aprendiéramos a separarla de las aguas fecales y echarle cloro y otros productos químicos, beber agua era tan peligroso como una caja de bombas. De hecho, la gente, si podía evitarlo, no bebía agua. Ni tampoco mucha leche, excepto la materna, pues antes de que aprendiéramos a pasteurizarla (por si no te has dado cuenta, pasteurizar viene de Luis Pasteur, el padre de la microbiología moderna) provocaba masivamente tuberculosis bovina, neuropatía inflamatoria desmielinizante, enteritis, carbunco (ántrax) y demás. Así pues, hasta los niños bebían vino, cerveza o aguardientes si podían permitírselo, que no eran mucho más seguros pero un poquito sí, por la presencia de alcohol: el alcohol es un conocido antiséptico.
Por cierto. Para comer mínimamente bien había que ser rico. Pero rico, rico de narices. La comida era muy cara de producir, conservar, transportar y comercializar, y estaba sujeta a numerosos imprevistos. El precio del pan fue una cuestión de estado durante milenios, sabiendo que un aumento excesivo debido a la escasez o la especulación podía ocasionar revueltas y subversión, dado que la gente no tenía mucho más para comer. Libros revolucionarios clásicos como La Conquista del Pan del anarquista Pyotr Kropotkin, o incluso textos como el Lazarillo de Tormes, Rinconete y Cortadillo o el mismo Sancho Panza en el Quijote nos transmiten una idea de lo muy complicado que era alimentarse para la gente de a pie, y la miseria general en que vivían. Con frecuencia, una familia no podía pagarse las calorías necesarias para alimentar a todos sus miembros; hacerlo de forma saludable o al menos variada era una fantasía de aristócratas, arzobispos, reyes y papas. Estar gordo era la moda y el referente estético de belleza y éxito social, porque sólo los muy adinerados y poderosos podían permitírselo; las personas corrientes estaban flacas como espartos por simple desnutrición y exceso de trabajo físico. Estar flaco era cosa de pobres. Ahora son los pobres los que están gordos, al menos en el mundo desarrollado, debido a la mala nutrición pese al exceso de calorías; y los más acomodados pueden permitirse alimentos, cuidados y tratamientos que les permiten... estar delgados.
Mugre, ignorancia, superstición, tiranía.
El pasado era un sitio sucio y maloliente, con ratas y parásitos por todas partes. Donde había alcantarillado, solía estar abierto; sólo los ricos podían pagarse termas, baños y cosas por el estilo. En la mayor parte de lugares, la higiene era un concepto desconocido e innecesario, porque no sabíamos nada de microbios.
Qué demonios. Éramos ignorantes como piedras: una turba vil y analfabeta presa de tiranos, demagogos, clérigos, santones y toda clase de supersticiones. La alfabetización era un secreto gremial de escribas, monjes y sabios; la mayor parte de la gente no sabía leer o escribir ni su propio nombre y no digamos ya cualquier rudimento de cultura general. Los niños no comenzaron a ir a la escuela sistemáticamente hasta mediados del siglo XIX. Hasta los nobles, y a veces los reyes, eran más brutos que sus caballos. El príncipe del cuento era un asno palurdo y brutal. Y el venerable sabio local, un analfabeto desdentado y maloliente, supersticioso y machista hasta el ridículo que se lo pasaba pipa cuando mandaban brujitas guapas a la hoguera. Las brujitas y en general cualquier hembra, por su parte, tenían exactamente las mismas luces que un trozo de carbón en una habitación a oscuras. En cuanto a los niños, no eran más que una boca que alimentar, una carga tratada a palos que ocupaba el último lugar de la casa, frecuentemente por debajo del ganado en el orden social. Eso de protejamos a los niños es otra modernez buenista; en el pasado, nadie habría puesto a un niño por encima de un adulto capaz de ganarse su propio pan. En cuanto a las niñas, si no te violaban de pequeña era sólo por respeto al honor de tu padre, suponiendo que tu padre fuera hombre libre y ya hubiéramos llegado a ese grado de civilización. Si naciste esclavita, o en una sociedad que no hubiera alcanzado ese punto, mejor no te lo cuento.
En un mundo así, toda clase de supercherías, miedos, religiones y tiranías calaban sin más en amplias masas sociales, desprovistas de las más tenues bases intelectuales para desafiarlos. La forma común de gobierno era garrotazo y tentetieso. No existía nada parecido a la justicia; la idea de que tuvieran que juzgarte con un juez imparcial y un abogado defensor bajo el imperio de la ley sólo se extiende al pueblo a partir de los procesos revolucionarios del siglo XVIII. La vendetta y la ordalía eran formas de justicia común, así como castigar hasta los delitos más leves con tormentos infames. Para los partidarios de volver al endurecimiento de las penas, recordaré que hubo un tiempo en que podían desmembrarte en la rueda hasta por robar gallinas, sobre todo si el dueño de la gallina pertenecía a las castas superiores, y nunca dejó de haber ladrones, violadores o asesinos. De hecho, había muchos más que ahora: la miseria, el hambre, la opresión y la incultura propulsaban constantemente a grupos de población hacia la delincuencia, desde el pequeño robo hasta el bandolerismo y la piratería. En realidad, no había justicia ninguna, en el sentido actual del término: sólo la voluntad de los poderosos.
Hay quienes, por absurda idealización, creen que estos mundos del pasado podían ser mejores que el mundo presente. No lo fueron, jamás lo fueron: para la inmensa mayoría de quienes vivieron allí, constituían un infierno sólo aceptable porque no conocían nada mejor y porque creían a machamartillo en paraísos religiosos. Pero si a cualquier padre o madre del 300.000 a.C., del 30.000 a.C., del 3.000 a.C., del 300 a.C., del 300 d.C., y hasta del 1.900 d.C., le hubiesen dicho que llegaría un tiempo en que podría llevar a su hijo enfermo a un hospital con médicos científicos, antibióticos, TACs, analgésicos, de todo, y que luego se lo podría llevar curado a casa para bañarlo con agua calentita que sale de un grifo a precio ridículo –sí, ridículo: la leña y el carbón costaban el sueldo de un mes–, meterlo en una cama sin piojos, chinches o pulgas y darle de comer toda clase de alimentos y agua que no lo pone más enfermo... si hubiera podido comprenderlo, si hubiera podido vislumbrarlo, habría pensado que éste debía ser el paraíso de los dioses benevolentes prometido en sus profecías. Y desde luego habría firmado cualquier cosa con tal de estar aquí, no allí. Aunque no podía. No sabía firmar.
Pese al fatalismo de los pesimistas, la humanidad ha demostrado constantemente su capacidad de mejorar, de evolucionar, de progresar hacia un futuro mejor. Para ello tuvimos que deshacernos de un montón de rémoras del pasado, estudiar profundamente y transformar la realidad de maneras radicales, a veces pacíficas y a veces violentas. Y tendremos que seguir haciéndolo si queremos ir aún a mejor. En todo caso, mereció la pena y sigue mereciendo la pena. Puestos a malas, yo prefiero morir con morfina en el más infame hospital de nuestro tiempo que sin morfina en cualquier palacio de aquella Arcadia infeliz. ¿Y tú?
Totalmente de acuerdo. La descripción es impresionante pero es que el pasado lo era. Y con la esperanza de vida media, la mayoría ni siquiera estaríamos aquí para leer esto.
ResponderEliminarLa única ventaja del pasado, que una vez leí por ahí, era que en la Edad Media un "siervo" necesitaba trabajar solo 6 meses al año para vivir. Claro, había que ver las condiciones en que vivía...
ResponderEliminarEste post es buenísimo!!
Los ciudadanos griegos llevaban una vida bastante parecida a la nuestra, evidentemente, a costa de los esclavos que hacían todo el trabajo. Los ciudadanos romanos tampoco vivían mal del todo, así como los egipcios. Fue en la edad media cuando sufrimos una época de barbarie y retroceso.
ResponderEliminarNo hay que generalizar, piensa por ejemplo en las tribus del amazonas que vivían aisladas y ancladas en la edad de piedra, creo que eran bastante felices. Evidentemente el progreso es imparable, pero creo que tenemos mucho que aprender del pasado.
Muy buen artículo, por cierto.
Lo que estás describiendo fundamentalmente se centra en la Edad Media el gran retroceso. Como dice nade egipcios, griegos y romanos vivían mejor a costa de sus esclavos. No podrían hacer mucho si se enfermaban cierto pero podían beber y comer bien. El problema está cuando faltan los suministros y comienza el hacinamiento/infecciones.
ResponderEliminarMuy buen artículo.
Lamento que os hayáis quedado con la percepción de que el artículo se centra en la Edad Media -mea culpa, hay muchas referencias en él a ese periodo- porque no es así. En Grecia, Roma, Egipto, la inmensa mayoría de la población comía pan de farro, eran ignorantes como un guisante, vivían sometidos a un puñado de aristócratas (en el mejor de los casos, de demagogos), y hasta los reyes, faraones y tiranos sufrían de las mismas tasas de mortalidad infantil, de las mismas caries, de los mismos índices de fiebre puerperal, del mismo todo. En los meses de verano en Roma, la mejor opción para los ricos y poderosos era abandonar la ciudad para no caer de malaria, tuberculosis y demás; el resto, a san j*derse en las insulae que se caían cada dos por tres. Y como eso todo. Por no mencionar que cualquier cosa parecida a la justicia era inexistente: si te enfrentabas con un poderoso, lo más normal es que se acabaras lleno de agujeros en un rincón fueras quien fueses. Las garantías jurídicas de la mejor civilización de la Antigüedad eran análogas a las que vemos hoy en día en zonas de guerra, o peores.
ResponderEliminarEn los cazadores-recolectores anclados en el Paleolítico ya ni entro, pero esas tribus de aborígenes no viven ni han vivido nunca precisamente bien, y su orden social es también un asco.
Sabéis, al ponerme a escribir el artículo pensaba titularlo "el pasado era un asco", así más educadamente. Pero conforme iba releyendo cosas y documentándome cada vez más, me quedé con el título presente. En términos relativos unas sociedades estuvieron mejor que otras, sin duda, pero en términos absolutos y desde nuestra posición actual, hay muy poquitas cosas anteriores al siglo XVIII, y con frecuencia el XX, que merezcan ser salvadas. Simplemente, yo no me cambio por ningún rey, emperador o santón de la Antigüedad. No sin penicilina, morfina y al menos rudimentos del método científico y de los valores políticos modernos.
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ResponderEliminarEs un gran artículo, que guardaré como referencia. Habría que dedicar uno especial a la edad media europea, para todos aquellos que todavía piensan que era una época de gestas artúricas y combates caballerescos.
ResponderEliminarGran artículo, solo una cosa que añadir. No solo el piojo corporal produce enfermedades, las garrapatas, los piojos y, en general, los parásitos hematófagos pueden producir rickettsiosis.
ResponderEliminarBravo. Un artículo genial, directo, impactante.
ResponderEliminarEs preocupante como el oscurantismo, la obsesión por un pasado que nunca existio, permea a todas las capas de la sociedad, a todas las ideologias políticas.
Como dicen arriba, me guardo el artículo como referencia, y a darle la mayor difusión posible.
Que sí, que llevas razón. Morfina en hospital inmundo, por doraemon, que me den la morfina y se queden ellos en su pasado.
ResponderEliminarQue razón tienes... lástima que dentro de 100 o 200 años, nuestros descendientes sí tendrán razón al decir que el pasado fue mejor.
ResponderEliminarEnhorabuena por el artículo.
ResponderEliminarMuestra sin ambages la realidad y lo extremadamente bien que vivimos (sobre todo en el primer mundo).
Y que nos quejamos de puras tonterías.
Menuda ridiculez de artículo. 300.000 a.C., del 30.000 a.C., que datos tienes tú sobre esa época. La gente antes de la expansión de los imperios y de las colonias era libre y vivía mucho mejor y más años (con más mortalidad infantil eso sí, por eso la esperanza de vida era menor aunque eran más longevos), lee los textos antiguos. ¿Has leido a bartolomé de las casas?
ResponderEliminar¿Y el presente? ¿cómo es?
ResponderEliminarLo has retratado estupendamente.
Saludos
Discrepo yuri. Ciertamente, en cuanto a la sanidad y salud alimentaria, vivimos mejor. Pero hoy por hoy vivimos bastante peor. Y vivimos bastante peor porque nos falta algo tan sencillo como sitio por el que movernos. Antes (edad media o no, yo no le puse tiempo más allá de "antes del sXIX"), el que no quería vivir en la "urbe" vivía en el campo de lo que daba la tierra, de lo que cazaba o de lo que conseguía trocando lo que sea. Hoy día, el 99% de los que viven en una ciudad, se ven abocados a ella malviviendo de basuras (que desde el punto de vista sanitario tampoco es algo muy sano), y vive atado a sus posesiones: trabajar como un negro para pagarte el coche (e impuestos, seguros, gasolina -más impuestos-, repuestos...), para pagarte el techo donde el banco te deja dormir mientras devuelves lo prestado, pagar luz, agua, teléfono y para colmo has de aguantar al vecindario. Antes vivías donde te salía de las pelotas sin dar mucha explicación a nadie (era más fácil que hoy, que propietarios también había), con unos troncos te hacías tu casa (o con piedras) y a vivir la vida. Hoy día, con una mayoría importante de campo arrasado para el cultivo a gran escala, es algo más complicado que en el pasado, pero no imposible.
ResponderEliminarDesde que se inventaron los impuestos, y la idea de trabajar para y por el dinero, se ha tenido bien atado a un estrato de la población importante siempre bajo coacciones (antes la horca, ahora la amenaza es la calle o la cárcel, según).
Lo mismo es que últimamente me estoy escapando demasiado por el campo, pero la realidad es que se vive con más libertad y con menos preocupaciones que en una sociedad moderna (siglos XVIII-XIX en adelante). Y esa idea se ve nublada por el hecho de que hoy día tenemos cosas que antaño eran cosas de ricos: un coche, simples calculadoras que hace 30 años costaban más de 10.000pta, un teléfono con pantalla de un gritón de pulgadas y cámara de otros tantos megapixeles, etc. Todo ello nos hace tener la sensación de evolución, pero lo cierto es que es todo lo contrario, se está "involucionando". Es el trabajo lo que dignifica, no el dinero. Y lo del trabajo con pinzas, en tanto es un invento humano antinatural (en la naturaleza reina la ley del mínimo esfuerzo).
Con lo del agua creo que has sido un tanto catastrofista. Ya entonces la población humana presentaba, de forma neta, un crecimiento más o menos lineal y eso que si estamos sin beber más de unos pocos días palmamos, así que beber tenían que beber por huevos. Y vivían más de los que morían. Además, aplicando conocimientos de hoy se puede beber sin peligro y sin usar tecnología de las que vemos habitualmente con productos químicos específicos ni grandes instalaciones. Basta una simple hoguera y, según el agua, ni eso, sólo beber en zonas concretas.
Y todo ello hay que ponerlo en su contexto. El crecimiento humano desde la revolución industrial también es antinatural. Vivimos en una placa de petri que hemos creado, donde crecemos y vamos más allá de donde la naturaleza nos deja. Tenemos la sensación de estar por encima, pero el tiempo nos pondrá en su sitio del mismo modo que un cultivo bacteriano vuelve "a su ser" pasado el tiempo suficiente. Antes esa concentración de humanos por hectárea era una cantidad astronómica y hay conceptos que pueden funcionar bien para una población de 30 personas y no tiene por qué cumplirse en una población de 300.000 personas como una ciudad actual normalita. No hay que perder la perspectiva que nuestro crecimiento actual es del todo anómalo, un pico dentro de una tendencia. Dentro de 50, 100, 200 ó 500 años bajará la población y se volverá al lento y progresivo crecimiento lineal que había antes, por el motivo que sea: ya sea porque la gente se va a marte y la tierra pierde lastre, bien sea por las guerras por los recursos.
Antes el precio a pagar era la esperanza de vida, hoy el precio a pagar es nuestra libertad.
Menudo ladrillo me ha salido y eso que tuve que recortar porque no deja más de 4096 caracteres.
ResponderEliminarPerdona Yuri, que éste es tu blog, hahah.
A mí también me gusta ir al monte. :)
ResponderEliminarMira: suelo ir en un coche con decenas de miles de euros en tecnologías avanzadas, consumiendo combustibles fósiles traídos de regiones remotas, guiado con un GPS satelitario y comunicado mediante un teléfono móvil.
Lo hago esencialmente libre de enfermedades gracias a 250 años de medicina científica, con botas diseñadas por ingenieros para protegerme los pies, unas gafas construidas por ópticos con precisión de milésimas, sin dolor de muelas, sin infecciones, bien alimentado por una diversidad de comidas y líquidos seguros traídos también de muy lejos.
Si me caigo y me rompo una pierna, llamaré al 112 por mi teléfono móvil. Vendrá la Guardia Civil, una ambulancia, una UVImóvil o un helicóptero en caso necesario, y me llevarán a un hospital con millones de euros en tecnologías avanzadas para curarme el hueso roto. Después iré a una casa -la mía- con electricidad, agua potable fría y caliente según necesite, mis medicamentos contra la infección y el dolor, y me conectaré a Internet para discutir con todo el mundo por el mismo cabreo que llevaría con mi pierna rota.
Así mola el monte. Así mola la naturaleza. Así hasta me puedo poner en bolas y dedicarme a abrazar árboles o tirarme un finde de supervivencia o de modern primitive.
Pero si no tuviera más remedio que estar en el puñetero monte buscando bayas y raíces o alguna pieza de caza o un poco de carroña, arrastrando de tres críos desnutridos, con dolor de muelas, una hembra enferma... entonces la cosa cambia. Y tendría verdadero pánico, terror, a romperme esa misma pierna. Porque eso significaría mi muerte y puede que también la del resto del grupo, si es pequeño. Y no digamos a encontrarme con algún otro clan que tenga un par de machos más y nos puedan romper la cabeza a todos. ¿Policías? ¿Jueces? ¿Dónde?
No somos conscientes de lo mucho que dependemos de la sociedad en que vivimos incluso cuando vamos de rollito 'natural'. :)
Respecto a lo de la maternidad a los 12-13 hay una cosa que recuerdo. Hace muchos años estaba leyendo Fausto y estabab hablando Mefistófeles y Fausto sobre la bella Margarita. Decía el diablo:
ResponderEliminar- Un poco joven para tí ¿no?
- Pues los 13, ya los ha cumplido -contestó el otro.
Y tampoco hace falta irse tan lejos. La Leonor de Machado se casó con 15 años y murió con 16 (tuberculosis)
Saludos
Es duro, yuri, pero los premios Darwin son así. Funcionaban antes (aunque con otro nombre) y funciona en la actualidad.
ResponderEliminarAntes (y también ahora) ibas andando donde sea. En el caso que has puesto, debes trabajar durante X para comprar el coche, mantenerlo y cumplimentar con las leyes y fisco que haya al respecto. Igualmente debes trabajar durante X para pagarle al banco por tu casa (y al ayuntamiento). Todo ello para, eventualmente, disfrutar de algo (salir al campo, ir a la playa, lo que sea).
Ya en la antigua roma, si no ando muy descarrilado, sabían inmovilizar/entablillar las fracturas (no sé si antes también se sabía). Y sin GPS ya había mapas del mundo muy detallados hace siglos y, a partir del siglo XVI, se sabía con exactitud la posición simplemente mirando las estrellas y teniendo referencias del mediodía con artilugios que lo único que requieren son dos manos, ni electricidad ni nada de lo que ello conlleva (autonomía de la batería, fundamentalmente, y si usas un cachivache solar para recargarla, cuando agotes los ciclos de carga/descarga adiós).
También había medicinas, aunque se desconocía cómo actuaba esa cosa con el detalle que se conoce hoy día. Simplemente masticabas corteza de sauce, o te aplicabas unas hierbas en cataplasma, etc. y funcionaban (y funcionan hoy si te lo aplicas).
Incluso las gafas tienen su larga historia. Aunque no eran de cristal antirreflectante ni eran progresivas, permitían al cegato de turno cumplir con lo que quería hacer sobradamente (si sabía leer). Y sin saber de leer, sin gafas también podía el miope o el que tenía astigmatismo defenderse en la vida.
Hoy también puedes encontrarte con otro clan que te pueda romper la cabeza, y de poco te va a importar la policía o jueces porque ya estarías listo de papeles. Caput. Además, la justicia que había en el pasado no dista mucho de la actual: útil para los adinerados/poderosos, inútil para el ciudadano.
Yo me he cruzado con jabalíes y ciervos, además de bayas y frutos variopintos. Conociendo los hábitos de los animales no es raro encontrarselos. Incluso si te secuestran hoy día y te dejan tirado en mitad de un campo de cultivo tienes sustento de sobra hasta llegar a la sierra más cercana donde haya algún bicho u otro tipo de frutos. Antes existía el mismo problema que hoy día, aunque hoy se magnifica mucho más: el que pasaba hambre, se quedaba allí mismo (en su ciudad/pueblo) y, en un último intento se iba al campo, a otro sitio. Hoy en día la gente se queda en las ciudades, a comer auténtica mierda, comida muchas veces putrefactas, antes que salir al campo en busca de bayas. La gente se "pelea" en las zonas donde se desecha la comida de supers y rastros con comida que no es precisamente salubre.
Estás siendo muy catastrofista Yuri. Tu dependencia de la sociedad en la que vives es mucho menor de la que piensas. Y no hace falta ir en plan natural ni nada del estilo, simplemente ver algo que es evidente cuando se ve. Para alguien que tiene a la tecnología actual en esa estima sin duda algo así le resultaría, en el mejor de los casos, un disparate, pero a poco que se reflexione se ve :)
Me quito el sombrero, los aplausos y le muestro mi respeto y admiración por el artículo. Desde hace mucho tenía ideas muy similares a las de este post, aunque no tuviese los conocimientos para expresarme en estos términos. Aunque echo mucho de menos citas que puedan sostener muchos de los números y afirmaciones.
ResponderEliminarSe supone que nuestro pesimismo burgués es una de las peculiaridades de nuestra época, de esa postmodernidad donde nos hemos dado cuenta que tanto los paraisos religiosos como los laicos (fascismos, comunismos y anarquismos que luchaban por un mundo perfecto según sus recetas y donde solo entraban los suyos) no existen, que tenemos que vivir en este mundo humano, mediocre, siempre perfectible.
¿Tengo el permiso para citar algún párrafo en mi blog? Siempre con link y nombre del autor, claro.
Saludos.
interesante articulo y un premio a tu esfuerzo pero creo que te equivocas cuando criticas la teoria de la diosa, por favor lee los trabajos de la arqueologa Marija Gimbutas y quizà te hagas otra idea del pasado de la humanidad a partir del 3500AC hacia atras
ResponderEliminarenhorabuena por el articulo. estoy de acuerdo contigo y quien defiende que la vida en el campo en la antiguedad era mas facil creo que se equivoca de pleno.
ResponderEliminarel simple hecho de mantener un hogar a diario con sus animales, sus tierras para labrar, ir a por agua, conseguir comida, mantener tu casa, etc. eran tareas que requerian de todo el dia.
recuerdo estudios de los 90 que te mostraban la vida de una mujer tipo en africa o de un agricultor hacia un siglo y era gente que se levantaba al alba y se acostaba tras el ocaso sin dejar de trabajar.
todo esto cuando no habian inprevistos como tormentas que te dejasen sin tus plantaciones, incendios que te dejasen sin casa, crecidas de rios, robos, enfermedades de los animales y una infinidad mas de desgracias.
Espléndido artículo, espléndido. Enhorabuena. Además, muy ameno de leer. He disfrutado realmente leyéndolo y estoy completamente de acuerdo en todo.
ResponderEliminarPienso ,a veces ,que lo importante es la historia personal de cada uno y lo que va viviendo y experimentando.
ResponderEliminarCuando era jóven ,con mi tendencia a considerarme igual a todo ser humano fuese hombre o mujer ,un poquito la opiniòn de la gente con respecto a las mujeres que preferìamos conversar de temas de importancia y no de los temas estrictamente femeninos me molestaba.
Las reivindicaciones actuales de cuanto postergado consideran que la sociedad tuvo ,me parecen ridìculas.
Será porque desde que era niña todas las personas sean varòn ,mujer ,los descalificados por la sociedad(o sea los que ahora han bautizado con capacidad diferente)que para mì eran exactamente igual a mì.
En mi infancia jugaba con una chiquita down que al contestar las impertinencias con que nos retaba mi madre lo hacìa CON MAS PERSONALIDAD QUE YO.
En mi familia y entre las amistades de mi madre(eso que era de la ACCION CATOLICA)había amigas parejas lesbianas-mi madre tenìa dos parejas a las cuales apreciaba muchìsimo-y un tìo que tenìa vocaciòn al trasvestismo.
Mi madre me enseñò a respetar a toda esta gente y a quererles.
Por eso todas las evoluciones e involuciones aparentes medio me fastidian.
Por cierto, yuri, en el artículo de la historia de la cirujía de la wikipedia tienes detalles como éstos:
ResponderEliminar"Entre algunos tratamientos aplicados por los aztecas, según describen textos españoles durante la conquista de México, se encontraba esta recomendación para tratar las fracturas: "...el hueso roto debe ser entablillado, extendido y ajustado, y si esto no fuera suficiente se hará una incisión en los extremos del hueso, insertando una rama de abeto en la cavidad de la médula...".[2] La medicina contemporánea desarrolló este método de fijación ósea en el siglo XX denominándose en la actualidad "fijación medular"."
O éste otro, que dice que ya usaban opio como anestésico (sin saberlo ya usaban la morfina, que viene a ser alrededor del 10-15% del látex del opio):
Otra técnica quirúrgica de la que existen evidencias desde hace miles de años es la anestesia. El alcohol (árabe al-khwl الكحول, o al-ghawl الغول) es posiblemente uno de los anestésicos más antiguos, y existe constancia de su empleo varios miles de años antes de nuestra era.[5] También se conoce el uso del opio desde hace milenios (algunos cilindros babilonios y bajorrelieves mesopotámicos muestran cabezas de adormidera), con usos anestésicos además de los recreativos.[6] Otras sustancias empleadas desde antiguo con este fin son el extracto de Cannabis sativa, el enebro común (Juniperus communis), el acónito, la planta de Erythroxylum coca o la mandrágora.
Gorro:
ResponderEliminarSí, había algunas técnicas médicas "prácticas" en la Antigüedad. Pero eran una... mierda. :) ¿Intervenir una fractura abierta? ¿Combatir la infección? ¿La gangrena? Ni en broma. Ni de lejos. Amputación en el mejor de los casos. Por no mencionar el dolor.
Para ti todas las cortezas de sauce, las hierbas en cataplasma, los láudanos, el opio sin control sanitario del mundo o la borrachera como anestesia; te los regalo y te pongo 1.000 euros encima, pero a mí dame un gotero de morfina sintética, una caja de Augmentine y una jeringuilla de adrenalina. También te regalo a Paracelso, Galeno y Avicena juntos, y pongo otros 1.000 pavos, a cambio de un cirujano angoleño que haya pasado por una facultad de medicina científica.
Yo cuando me he visto en peligro suelo llamar a la policía o la guardia civil y, ¡oh, sorpresa!, han acudido. Incluso a veces he denunciado a alguien, y oye, tú, ha habido un juicio acorde al imperio de la ley y las cosas han ido más o menos como tenían que ir. Lento, pastoso y molesto, pero eso es una novedad civilizatoria que no tiene más de 200 años.
¿Óptica en la Antigüedad? Puede que algún sabio tallara algún cristal a algún emperador, como pieza única. Para el pueblo, nada de eso. Y esto en fases ya avanzaditas de la civilización.
¿Mapas en la Antigüedad? Sí, puede que algún navegante de altos vuelos o un rey tuviera acceso a una carta náutica. El resto tenía que penetrar en los bosques llenos de lobos para encontrar un camino.
No te hagas pájaras, amigo mío. :) Tú no querrías vivir más de una semana en aquel mundo. Y si tienes hijos, o ancianos, o gente que dependa de ti en general, no querrías ni a punta de pistola. ¿Más libertad? Puede que antes de la sedentarización. Pero entonces...
Ivano, Alber:
ResponderEliminar...entonces, del 3.500aC para atrás nos vamos al Mesolítico y al Paleolítico. Creo que tengo una idea bastante correcta, y los arqueólogos también, de lo que cabía esperar de una vida paleolítica o mesolítica. :) Básicamente, ser un yanomami o un aborigen australiano. No, tampoco lo cambio. Y si fuera chica, no lo cambio ni de coña.
José Calvo:
Sin problema en la reproducción citando la fuente.
Pepito:
El presente es... muy distinto. :)
Incluso en el África profunda, se puede encontrar penicilina para los niños con algo de esfuerzo y dinero. Allá donde se pueda encontrar penicilina para los niños, el mundo se vuelve un lugar infinitamente más amable.
La penicilina con garantías sanitarias, lógicamente, se fabrica en esas sociedades desarrolladas que tanto denostamos, sea Europa, Norteamérica, Rusia, China o la que quieras. Esas que por lo visto nos mantienen "esclavos" frente a la "libertad" del pasado (y yo que juraría que la esclavitud ha acompañado a la humanidad durante toda su historia hasta ser abolida precisamente por estas sociedades...).
No hubo, nunca hubo una Arcadia feliz de hombres y mujeres libres. Sólo clanes arrastrándose por los bosques y selvas, y siervos hacinados en marismas.
Y quien sueñe en ser príncipe, rey o emperador del pasado, o incluso hombre o mujer libre, que calcule las probabilidades de haber nacido en tal condición.
Gran articulo y totalmente deacuerdo con el. Enhorabuena.
ResponderEliminarLa respuesta, si, pero no. Ninguna de las cosas que has expuesto es falsa, pero como en toda verdad, siempre hay un segundo punto de vista. Antes la gente se moria antes, efectivamente, pero actualmente hemos llegado a circunstancias en que la gente muere tras un largo proceso de envejecimiento muchas veces doloroso e incapacitante. Ahora hay mas seguridad alimentaria pero hemos creado estructuras que hacen que gente que podria tener para comer no lo tengan como consecuencia de esas estructuras, mientras toneladas de alimentos se desperdician. Una cuestion poco conocida del pasado es que la gente necesitaba en general bastante menos trabajo para vivir, y que no se veian muchos los ejemplos de explotacion laboral que contemplamos con la llegada de la civilizacion. Habia mas enfermedades incurables, y tambien menos enfermedades provocadas por el hombre. Y habia ignorancia, supersticion y tirania, o sea, mas o menos como ahora. Africa vivia como un conjunto de tribus, ahora vive como un conjunto de miserias creadas en buena parte por la colonizacion. En conclusion, no es una cuestion de mejor o peor, sino mas bien, de diferente en los modos, con sus ventajas y sus inconvenientes.
ResponderEliminarde acuerdo Yuri entiendo lo que quieres decir pero para no perder la esperanza y la ilusion te aconsejo que leas algo de Marija Gimbutas. Esta Arqueologa nos dice que durante muchos milenios en Europa los hombres vivian en Paz y en armonia. Prueba esta teoria con muchos repertos y excavaciones. este periodo durò hasta que desde Asia central llegaran los pastores nomadas que traian consigo el Patriarcado, la guerra y un sistema de clase sociales que excluyan la condivision del fruto del trabajo comun. Luego vinieron los semitas y nos trajeron el monoteismo y eso acabo`del todo con esa era de paz y armonia con la naturaleza. Yo tampoco desearia probar a vivir en el pasado renunciando asi a todas las posibilidad de la era moderna. Pero no me olvido que de estos adelantos solo nos beneficiciamos en Occidente en el resto del planeta se sigue viviendo en el pasado, como tu bien describes.
ResponderEliminarAmo Marija Gimbutas porquè demuestra que existio y por lo tanto existe una forma de vivir en comunidad en paz y armonia.
A partir de estas premesas se puede y se debe pensar en el desarollo de las tecnologias hacia el completo bienestar de todos los humanos.
La cagaron los que nos trajeron la guerra y un solo Dios. Atencion soy Ateo pero a la arquelogia me remito:
Marija Gimbutas nacio en Vilna (Lituania), en 1921. En su juventud participó en expediciones etnográficas para registrar el folklore tradicional lituano, y estudió las diferentes creencias y rituales de la muerte en Lituania.
Realizó sus estudios de lingüistica en el Departamento de Folología de la Vytautas Magnus University (Lituania). Continuó sus estudios de arqueología en la University of Vilnius.
Centró su principal actividad investigadora en los periodos Neolíticos y la Edad del Bronce.
En 1946 se doctoró en la Tübingen University, con su Tesis sobre: "Prehistoric Burial Rites in Lithuania".
En 1949 se fue a los Estados Unidos de América, comenzando a trabajar en la Harvard University, sobre los textos arqueológicos de la Europa del Este.
En el año 1956 comenzó a gestar su tesis sobre los Kurganes (tumulos del Este de Europa), en la cual mezclaba aspectos lingüisticos con aspectos arqueológicos.
Gimbutas indentificó la diversa y compleja estructura de representaciones de figuras femeninas en el Paleolítico y el Neolítico como una representación única y universal de la " Diosa Madre", pero también manifestando la existencia de un surtido de deidades femeninas: "Diosa-serpiente", "Diosa-abeja ", "Diosa-Pájaro", " Diosa-montaña", "Señora de los animales, etc.. lo cual no era necesariamente ubicuo a través de Europa.
Durante los años 60 y 70, Gimbutas, se centró en el estudio de la Edad de Bronce indoeuropea y en el Báltico. Alcanzando su momento culminante con su obra: Bronze Age Cultures of Central and Eastern Europe (1965).
Como profesora de la UCLA, entre los años 1963 a 1989, dirigió importantes excavaciones arqueológicas en yacimientos Neolíticos como: Sitagroi y Achilleion (Grecia).
extracto desde http://zamoraprotohistorica.blogspot.com/2010/01/grandes-arqueologos-marija-gimbutas.html
En general, bastante de acuerdo contigo, el articulo es bueno y muy ameno y explica a las claras lo que se pretende explicar
ResponderEliminarY por otra parte, de acuerdo contigo tambien en la discusión que mantienes con el hombre gorrocopteril. Yo he pasado mucho tiempo en el campo, se valerme por mi mismo en él y ni de coña quiero eso.
La sensación de libertad solo es eso, una sensación. Si trabajar 40 horas semanales o las que sean para estar toda la vida pagando una casa es esclavismo, entonces es que no sabemos lo que es ser de verdad un esclavo.
Que antiguamente podias contruir sin permiso de obra y donde te saliera de las narices y nadie te ponia multas??Pues si. Pero daba igual. EL mas libre de esos recolectores del paleolitico se pasaria la mayor parte de su tiempo buscando comida, evitando peligros y en general, tratando de sobrevivir hasta la mañana siguiente. Y eso es un avance que hoy tenemos y es muy importante. Salvo casos extremos, incluso aunque estés en paro, sin un duro en la cuenta y sin nadie, sabes que vas a tener un tiempo mas que aceptable para intentar buscarte la vida, una situacion analoga en otro periodo de la historia significaria la muerte segura.
Emilio tejera:
No estoy de acuerdo contigo, el proceso de envejecimiento era igual de doloroso o incapacitante antes que ahora (bueno, no, era bastante mas doloroso e incapacitante), solo que ahora lo puede experimentar mucha mas gente. La seguridad alimentaria que tu dices que niega la alimentacion a una parte del mundo....antes ninguna parte del mundo tenia asegurada ningun tipo de alimentacion, la esperanza de vida en Roma o Grecia era muchisimo peor que la peor que haya hoy en el sitio mas horrible del interior de África. Y si en el pasado no habia explotación laboral...apaga y vamonos. Gran parte de trabajo era directamente esclavo y el que no lo era, era de sol a sol por un jornal miserable o por ,simplemente, que el señor del castillo te protegiera a ti y a tu familia (cosa que , para colmo, no cumplian en muchisimas ocasiones)
Y en Africa vivían como un conjunto de tribus, si, tribus que se mataban entre ellas a lanzadas y pasaban hambre y enfermedades. Como el resto del mundo. Solo que ahora se matan con Ak-47 y viven mas y tienen algo menos de enfermedad, aunque comparado con nosotros sea un verdadero infierno, en Paris durante 1600 seguro que se vivia aún peor.
Genial. Me ha encantado.
ResponderEliminarEsencialmente estoy de acuerdo en todo. La clave es, como has dicho antes, diferenciar los términos relativos de los absolutos. Y ya veo que alguno se queda por ahí.
ResponderEliminarPara hablar detenidamente de cada época no necesitaríamos una entrada de blog, sino unos cuantos libros. Así que sí, en términos generales (es que hablamos de toda la prehistoria e historia), y salvando algunos momentos/lugares muy concretos en espacio y tiempo, habría que ser bastante necio para negar que estamos en la mejor época para vivir.
Que sí, que en cierto modo seguimos siendo esclavos, que hay una gran brecha entre primer y tercer mundo, que la justicia aún no es perfecta, la educación deja mucho que desear, etc. Pero en términos absolutos nunca hubo nada mejor.
Joer, es que simplemente empezando por las tasas de moratalidad infantil, ya se me hace difícil seguir un debate :S
Me ha parecido magnífico, mis felicitaciones. Es un tema que últimamente ha salido varias veces entre amigos. Si me permites, solo un pero:
ResponderEliminar"Unos pocos (cada vez menos) siguen creyendo que todo tiempo pasado fue mejor [...]"
Será por mi pesimismo recalcitrante pero no tengo yo la impresión ni de que sean pocos ni de que sean cada vez menos. Ojalá me equivoque.
Lo dicho, felicidades por un artículo magnífico.
Un saludo
Buen artículo, pero creo que pecas de pesimista. Has pintado las penurias de los tiempos pasados y te has olvidado de mencionar todo lo bueno. ¿Creéis que no lo hubo? ¿Te has subido alguna vez a un bus urbano? Pienso que, hablando en un sentido evolutivo amplio, el contexto histórico es independiente de la percepción que tenemos de tristeza/felicidad. Desgraciadamente por mucho que hayamos avanzado en ciertos aspectos de la vida la gente seguirá sufriendo tanto por cuestiones serias como por banales.
ResponderEliminarDiego:
ResponderEliminarSubo todos los días a algún bus urbano, y también al metro. Me encanta. Me lleva sin cansarme a lo largo de kilómetros en pocos minutos, a un precio ridículo, de una manera muy civilizadita. Veo a gente de todas las naciones y modos de vida, y a veces hasta converso con ellos, si el recorrido es largo. No pillo ninguna enfermedad contagiosa grave, gracias a la eficacia de los sistemas modernos de salud pública. Y encima, la mayor parte de los modernos son respetuosos con el medio. ¿Cuál es el problema de un autobús urbano? ¿Qué había en el pasado que lo mejore?
¿Qué había en el pasado no ya que mejore cualquier cosa del presente, sino que sea al menos comparable? ¿Cuáles eran esas cosas buenas que no tenemos hoy? :)
sí, coincido contigo en que desde el punto de vista del usuario el transporte público puede ser útil y enriquecedor, pero lo menciono porque últimamente lo uso más, y al menos en la ciudad donde vivo lo que predominan entre algunas de las cosas que mencionas son las caras largas o el cuidado de las apariencias, parece que ya no es normal mirarse a los ojos o interactuar. soy de la opinión de El hombre del gorrocóptero - [...]
ResponderEliminarDiscrepo yuri. Ciertamente,[...]-
Como él también creo que involucionamos, hemos impuesto un ritmo y unas coordenadas que no nos llevan a buen puerto. Te invito a venir un día aquí a subir en el 20 en hora punta un par de veces, lo bueno que tenía lo pierde de golpe, el chófer poniéndose de pie para cobrar a gente que tiene que entrar por la puerta de atrás porque por delante no caben... en fin, el transporte público está de puta madre, pero si se gestiona bien, y si te toca pillarlo todos los días así, mal asunto, aunque también es cierto que de eso antes no había, quizás sí una carreta de madera, un tren cutre o un caballo, pero no son del todo comparables en este caso. Bueno, imagina el primer viaje que se hizo en tren, debió ser al menos emocionante.
Creo que comparable podría ser andar de caza por el bosque siguiendo la orilla de un río de aguas transparentes, vislumbrar entre el ramaje una moz@ refrescándose, y perder la virginidad haciéndole el amor en el lecho del río sin saber muy bien qué está ocurriendo, antes de que ningún prejuicio censurara nuestra naturaleza. Bueno, por poner algo, o cualquier noche en cualquier bar quizás también, pero hablando en serio,el hecho de que nuestro sistema regulador del placer sea un mecanismo fruto de miles de años de evolución que guía nuestra interacción con el ambiente para mantenernos en un equilibrio que nos ofrezca un punto óptimo de desarrollo y perpetuación, creo que es motivo suficiente para pensar que sufrían mucho, pero que por ende disfrutaban mucho.
perdón por la parrafada :)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEs gracioso.
ResponderEliminarA mi entender, todos los que abogan por una "felicidad" en cualquier tiempo (incluido ahora) es realidad no es más que desconocimiento (o ignorancia, depende) de lo que puede ser vivir mejor. Una tribu nómada que se dedica a la caza del mamut puede ser perfectamente feliz porque no conoce otra cosa y disfrutará de la vida mientras tenga que comer y no llegue otra tribu y se coma sus mamuts y a ellos (porque me suena que esa gente comía de todo, incluido señores) Uno de estos cazadores podría estar muy orgulloso de su lanza de silex para cazar ... porque no sabe los que es un Holland&Holland express .500 ... dale uno de esos para cazar mamuts y verás que hace con la lanza.
Es muy fácil ser feliz si desconoces que existen cosas mejores. Esto es como los emigrantes subsaharianos que vienen a Europa. Antes estaban tan tranquilos en sus casas (es un decir) y siempre han tenido guerras y explotación (vease la historia del amigo Leopoldo de Bélgica) pero ahora, aparte de eso, tienen TV y parabólica y ven que hay algo mejor al norte.
La teoría del buen salvaje está muy bien para Rousseau, pero cuando el salvaje empieza a descubrir que hay algo mejor, enseguida tira el taparrabos y el tamtam y se compra unas Nike y un teléfono móvil. Nosotros ahora mismo pensamos que somos más o menos felices porque tampoco sabemos por dónde irán los tiros. Seguro que el propio Yuri no se imaginaba hace 20 años que hoy se iba a ir al campo con el TT y el móvil que tiene. Hace 20 años iría con un Land Rover (o con el 131) y si tenía suerte, un Walkie Talkie ¿GPS? ¿qué es eso? una brújula y gracias.
Saludos
Me saca de mis casillas oir una y otra vez eso de que la vida es ahora peligrosa, que estas cosas antes no pasaban y que vamos de mal en peor. LLevo toda mi vida diciendo esto que tu expones tan crudamente, y sabiendo que hoy vivimos infinitamente mejor que lo hemos hecho nunca.
ResponderEliminarNo hay mas que leer, como bien dices obras de hace un par de siglos, siempre recordaré Las crónicas de Indias...
A los agoreros que quieren criminalizar la vida, a aquellos que se encierran en sus casas por miedo o que desconfían del vecino, había que darles un paseito por estas épocas pasadas para que por fin dejen de darnos la carga.
La civilización AVANZA, gracias a dios.
Por favor ¿No puede alguien ser un poco positivo para variar? Parece que es pueril y queda mucho mejor despotricar...
Yo creo que no sólo ha de tenerse en cuenta las, digamos, "condiciones objetivas", en las que ganamos por goleada hoy día, la cuestión también sería cómo esta gente interiorizaba lo que vivían. He estado en algunos sitios concretos con condiciones de vida muy precarias y a la gente se la veía, en general, bastante feliz, tenían otra actitud. Creo que para valorar correctamente si el pasado era "una mierda" debemos tener en cuenta no sólo esas condiciones objetivas sino también la mentalidad con la que la gente abordaba la vida, cómo se sentían frente a lo que sucedía en el exterior. Porque si lo interiorizaban bien, entonces el pasado "no era una mierda" aunque visto desde nuestra perspectiva lo parezca.
ResponderEliminarImagina que en el futuro por ejemplo, comentan, "Qué infelices eran en el siglo XX, era una mierda, no podían tener acceso instantáneo a la información por medio de chips cerebrales, ni teletransportarse, ni suprimir su dolor físico por medio de un comando, ni elegir el adn de sus hijos..." Quizá para esa gente, vivir sin eso sea un infierno, pero no para nosotros.
Hay estudios sobre la felicidad de la gente en los países, y los resultados indican que el progreso, la sanidad o la estabilidad política no implican necesariamente felicidad. Esos estudios pueden ser cuestionables, hablamos al fin y al cabo de algo bastante difícil de medir, pero sin duda nos plantean cuestiones bastante interesantes. Aquí podéis consultar uno de ellos: http://www.lareserva.com/home/paises_mas_felices_indice
Ahora tambièn continuamos en la mierda.
ResponderEliminarMe tocò observar ,en total confianza puès conocìa personalmente a la familia del ministro de salud ,las presiones internacionales de los laboratorios para prohibir un medicamento contra tumores malignos a base de veneno de cròtalo.
Estaba en faz de experimentación y era una seria de derivados que se estudiaban con gente argentina talentosa (que tambièn los hay a pesar que nos gobiernan los desastres) y en otros lugares del mundo habìa investigaciones con veneno de distintos animales que aparentemente prosperaban.
Parece que se tomaba en cuenta que los principales especialistas oncològicos habìan importado aparatos de rayos y drogas convencionales.
No le tengo mucha fe a la ciencia moderna ,puès aparte de gente que hace culto de la ciencia y es realmente consiente de los resultados de sus experimentos(con lo que demuestra real capacidad) está el arribista que para lucirse más siempre prefiere los riesgos ,la novedad o la intrepidez.
ResponderEliminarTambién los cambios de uno al otro extremo ,con difusión fundamentalista desde el punto de vista cientìfico ya que se exponen como palabra santa principios totalmente contradictorios,me hacen pensar que la ciencias ha tomado un camino un poco ligero para ser ciencia.
Con respecto a las enfermedades más importantes de la segunda etapa del siglo veinte solo se ha avanzado notablemente en cardiología y solo en base a cirugía.
En Argentina si vivimos en todos los mundos y en todo los tiempos.
ResponderEliminarEn la ciudad de Buenos AIRES y principales ciudades del interior había ómnibus relativamente grandes y buenos tranvìas y trolebuses(tambièn amplios).Eso alrededor de los cincuenta sesenta setenta ,en los ochenta se empezó a reivindicar el colectivo tipo argentino o sea más pequeño para fomentar ligereza de una ciudad endemoniada en el tránsito ,todos eran más pequeños y ágiles pero con el motor adelante y prominente,no se como no se dio cuenta el diseñador que los chofferes de baja estatura no veían a las personas que pasaban por el rayado establecido cuando las luces lo autorizaban y asì se llevaron por delante a ancianos discapacitados que trataban de avisarles con su bastòn que no habìan terminado de pasar(quedaban escondidos en la parte delantera del colectivo) .Se prohibieron las motos y bicicletas.
Bueno ahora ,copiando a PARIS han autorizado motos y bicisendas en un tràfico cada vez màs complicado y han empezado a construir ómnibus gigantescos (gracias a DIOS sin motor adelante y con el vidrio bajo).Pero en realidad con los ómnibus gigantes ,los taxis en disputa por la misma senda ,las bicicletas y motos en estricta contramano esto ya es el infierno del DANTE.
Otro problema que tengo con la ciencia actual son los trasplantes.
ResponderEliminarPensar que ,aunque somos ciudades inmensas y países grandes donde muere gente constantemente ,se está deseando la muerte posterior de alguien sano para salvar la vida del enfermo.
Pienso que por ejemplo la iglesia catòlica debería autorizar el cultivo de òrganos de la propia persona (creo que eso se puede clonar actualmente).Peor es que un cura rece porque aparezca un òrgano ya que con eso està deseando la muerte de un ser sano.
Completamente de acuerdo con Bullx.
ResponderEliminarEl artículo deja claras muchas cosas que yo también he pensado a veces y que olvidan quienes defienden que "cualquier tiempo pasado fue mejor". Ahora bien, no podemos reducirlo todo al bienestar médico o a temas políticos.
Sin duda es más agradable vivir en una época donde hay buenos métodos de anestesia, telecomunicaciones, la democracia es algo no demasiado raro en el mundo... en eso estoy de acuerdo. Pero dejar de mencionar los aspectos positivos del pasado, también es ser parcial: Había menos vigilancia y control por parte de las autoridades, existían nuevas tierras que ocupar, nuevas oportunidades. Ahora todo está bajo control. La libertad que respiraba el pionero que se adentraba en el Oeste americano, por ejemplo, ya no es posible.
Cosas que se mencionan como negativas (esperanza de vida más baja) también tenían su aspecto positivo: La sociedad era más joven y esto se traducía en muchos aspectos. Más dinamismo e ilusión, más empuje... Ahora somos cada vez más una sociedad de ancianos que hacen viajecitos y padecen parkinson.
Se ha dicho que la mayor parte de los ciudadanos vivían en condiciones miserables, pero también hay que tener en cuenta el sistema esclavista. En el pasado, no había máquinas (o casi), y por tanto se usaba mucho a los animales o, cuando estos no eran suficientemente hábiles, a las personas. En nuestro tiempo, animales y personas se han librado de una buena parte del trabajo gracias a la robótica, pero entonces era casi imprescindible recurrir a esclavos. De ahí que cuando alguien protesta diciendo que por ejemplo en Atenas la mayor parte de los ciudadanos no influían en la vida política, están diciendo una media verdad: los que no influían sencillamente no eran ciudadanos. Hoy en día parece duro decir eso, pero para alguien de entonces era normal.
La política, tampoco ha evolucionado tanto. Cuando uno lee a los filósofos antiguos debatir abiertamente sobre las formas de gobierno, siente vergüenza de la mentalidad estrecha de nuestro siglo, en el que apartarse del pensamiento único se ve casi como una herejía. Además, quien conoce bien la democracia ateniense o la república romana, sabe de sobras que eran mucho más democráticas que nuestras oligárquicas democracias representativas.
Y sobre la salud de las aguas y temas relacionados... Bueno, los métodos de purificación estarán más desarrollados, pero ¿cuántas sustancias tóxicas bebemos o comemos cada día sin darnos cuenta? ¿O qué alimentos transgénicos o dopados con hormonas de dudoso efecto en nuestro organismo? ¿Qué calidad tiene el aire que respiramos comparado con el del siglo XVIII (no hace falta ni irse al Paleolítico)? Me hace gracia que el autor hable del hedor de aquellas épocas, cuando lo cierto es que nuestro aire probablemente sea mucho peor. Eso por no mencionar pequeños pero significativos detalles, como que ya no puede verse el cielo estrellado tan claramente como entonces.
En definitiva, yo también creo que es mejor vivir en nuestra época, pero cuidado, tampoco es oro todo lo que reluce.
Predicas a un convencido :)
ResponderEliminarLa idealización que tanta gente, incluidos algunos de los que han comentado, hacen del pasado es porque no lo conocen, o porque proceden de una capa social en la que las desgracias las conocen de los libros. Los que hemos nacido de familia pobre y en un pueblo, sabemos que las alabanzas de aldea son propias de hipócritas o de permanentes románticos insatisfechos de clase alta, ignorantes de lo que se deslomaban nuestros abuelos.
Lo cual no quita que haya mucho que mejorar, y que haya que pelear para que las ventajas se extiendan a todo el mundo, y que no necesariamente aumente la felicidad, porque ésta depende de las expectativas. Pero todo esto es un tema distinto.
Está claro que la vida en el siglo XXI es muchísimo mejor que del siglo XVIII para atrás (un trabajador de obra en cualquier país desarrollado vive varias veces mejor que cualquier rey franchute en plena Ilustración), pero la cosa va por zonas. No ha habido el mismo progreso en el Occidente desarrollado que en el resto del planeta.
ResponderEliminarSiglos atrás, las desigualdades eran mucho más tenues, hasta remontarnos al Paleolítico, cuando las diferencias en el nivel de vida eran irrisorias, incluso entre el macho alfa del clan y el más pringado dentro de éste. La sociedad contemporánea ha fracasado (al menos hasta el día de hoy) a la hora de construir un mundo más equitativo y con semejantes estándares de vida, salud y felicidad (dependiendo de qué se entienda por felicidad).
Sin embargo, estoy convencido de que el individuo medio va mejorando con el paso del tiempo. Acabaremos siendo mejor sociedad en conjunto y acabaremos constituyendo un bienestar global mucho mejor que lo que tenemos ahora montado. ¿Cuánto tardaremos? Ni idea, pero confío en ello.
Por tanto, bien vale desmitificar ideales sobre los tiempos pasados (hombre, a mí me gustaría pasar un día en cierta época y lugar, pero poco más, y siempre con contrato de vuelta a mi lugar espacio-temporal de origen xD) y destapar las miserias en las diferentes épocas, pero no perdamos la perspectiva sobre lo que acontece hoy: tenemos más tecnología que nunca, pero en algunos casos se obstruye por ir contra los intereses de las élites económicas, y en otras abusamos tanto de ella que despilfarramos tanto en dinero (ejemplos: renovar móvil o TV cada tres-cuatro años) como en vagueza (ejemplo: coger el coche hasta para ir al otro lado de la manzana), mientras en otros países disponer de estos avances es como el paraíso terrenal que sería el siglo XXI para los antiguos.
Tenemos más alimentos que nunca, pero están fatalmente distribuidos. Y, mientras nosotros podemos desperdiciarla, otros, quizá en Malaui, Zimbabue, Bangladesh o Nicagarua, mataría por obtener nuestras sobras. Antes no había para comer, y ahora tenemos capacidad para alimentar a los 6.800 millones de personas que habitan la Tierra, y sin embargo el acceso a una alimentación aceptable igualitario es, aún hoy, un sueño.
Hoy hay más información que nunca. Hay tanta que ya es imposible abarcar todo lo que tenemos a nuestra disposición. Es una hecho absolutamente único en la Historia, y cualquier persona de hace cien años (y no digamos antes) hubiera tenido un patatús al saber lo que el más paleto de pueblo sabe hoy. Pero tenemos otro peligro ligado a la información: la sobreinformación... y sobre todo la desinformación, al servicio de los intereses políticos, económicos y financieros para enfrentar a los propios ciudadanos en discusiones vacuas (izquierda-derecha, Madrid-Barça, Belén Esteban-Campanario, pronuclear-antinuclear, fachas-rojos, etc), mientras el poder nos saja el bolsillo. No es algo que no ocurriese antes, pero el mundo cada vez está más controlado y es más difícil escapar de la espiral del sistema monetario, tan podrido que es el culpable de buena parte de los problemas actuales de la Humanidad.
Bueno, me ha salido un poco tocho pero más o menos he intentado resumirlo. Gran artículo Yuri, hay cosas sobre los detalles de aquella gente que desconocía completamente y unos e hace mejor a la idea. Pero no debemos pensar en que hoy vivamos en la casi perfección. Hay que buscar siempre la mejoría y cuestionar lo que vemos alrededor, y afortunadamente la gente tiene los medios para ser más consciente de ello.
Magnífica entrada, Yuri. Magnífica por la discusión que ha generado, entre otras cosas.
ResponderEliminarNo la comparto al cien por cien, quizá en un cuarenta por ciento. Ni ahora todo es jauja, ni en los tiempos pasados la gente era una mierda.
Porque la gente de entonces era -creo yo- básicamente igual a la de ahora. Un pequeño porcentaje de gente que piensa -y por ello se lleva palos- y un gran porcentaje de imbéciles a los que sólo les preocupaba quedar bien en la taberna.
No teníamos coches, pero el mar siempre ha estado ahí para navegar. Ya Heyerdalh demostró que los mares no separan culturas, sino que las unen. Y no teníamos aviones, pero salimos de Äfrica y conquistamos el mundo. Y quizá, algún día, las estrellas.
¿Explotación? Sí, por supuesto. ¿Injusticias? Sí, por supuesto. Pero un buen día aprendimos que la justicia está siempre de paso, que tenemos que luchar día a día por mejorar, y que el futuro vale la pena porque será mejor. Luchar porque mis hijas tengan un futuro mejor que yo.
Y eso, señor Yuri, no es nuevo. Creo que hace milenios que ese sentimiento existe.
Y se celebraba en la cosecha, y se celebraba cuando se cazaba, cuando llegaba el solsticio de invierno o cuando se pescaba.
Hasta la misa -y soy ateo, gracias a Dios- se CELEBRA. Porque siempre ha habido motivos para celebrar. Y el mejor motivo es que haya un mañana.
Hoy en día, eso sí, podemos celebrar el leerle. Pero siempre ha habido Yuris capaces de llevarnos más allá.
El artículo es espléndido. No resulta novedoso pero sí contundente.
ResponderEliminarEn mi infancia tuve que sufrir el subdesarrollo y la cutrez en un pueblo donde el desplazamiento a pie exigía el uso de madreñas (zuecos) que se clavaban en una mezcla de barro y estiercol extendida por doquier. A la entrada de la aldea había una portilla para que no se escaparan los cerdos (que vagaban libremente) y muy pocos vecinos disfrutaban de cuarto de baño.
El pasado era una marranada y no molaba nada. Los juegos infantiles incluían lanzamientos de piedras y destrucción de nidos de aves. De todo eso no hace demasiado tiempo. Todo ello por no hablar del frío que pasé y de los libros que no pude leer. La posesión de un balón era todo un privilegio.
El mito de la paz y la armonía en el pasado no se lo crée nadie. Es indemostrable. No hay pruebas de tal cosa.
También conviene que sepamos diferenciar conceptos de desarrollo, como el que trata esta entrada, de otro que ha sido aludido varias veces como es el de la felicidad.
ResponderEliminarEvidentemente están relacionados. Pero también es evidente que no funcionan de forma tan directa como algunos piensan. Ni el grado de desarrollo ni el dinero son vectores directos de la felicidad, a pesar de que mucha gente está convencida de ello. Por supuesto que alguien que haya vivido en otro periodo de la historia pudo haber sido más feliz que cualquiera de nosotros.
Pero estaremos de acuerdo en que, si ese alguien era más feliz, no era por no tener una buena alimentación, por no tener unas garantías de salubridad, o por no tener un sistema social que controle que no haga lo que le de realmente la gana (para lo bueno y lo malo, claro).
Espero que estemos de acuerdo en que las condiciones actuales, en general, son mejores para buscar la felicidad. Que haya mucha gente que no es feliz es un tema muy interesante, pero también complejo.
Alguien aquí me podría decir que sería más feliz viviendo en el campo, viendo la naturaleza, etc. Pero le recuerdo que eso tendría que ir acompañado de todas las desventajas propias de la época, ya bien descritas arriba y que, en su mayoría, harían improbable siquiera que vivieses para ser feliz o infeliz.
Quiero aclarar de este modo, que lo que dice Yuri no es que la gente en el pasado no pudiera ser feliz, sino que seguramente nunca se han dado unas mejores condiciones para que esto ocurra. O eso creo yo. Que seamos o no felices y las razones para ello es otro tema apasaionante que estoy seguro será tratado en este blog. Pero, recuerdo, no confundamos los conceptos.
Excelente artículo, les dejo este video:
ResponderEliminarEl Fraude del Primitivismo
http://www.youtube.com/watch?v=xxxONB0eECA
En líneas generales, bastante de acuerdo con el artículo.
ResponderEliminarFaltan, en mi opinión, matizaciones: no todos los tiempos pasados han sido igual de malos. Ya han citado como ejemplo el proceso oscuro e involutivo de la edad media. Creo que conviene destacarlo porque, ¿cúal era la característica fundamental de esa edad media?... la aparición del monoteismo a gran escala.
Pero entiendo que eso es otro tema.
Lo que quería destacar es que, para mi, lo importante es el futuro: el riesgo, yo creo que elevado, de que el futuro vuelva a traernos esas terribles imágenes del pasado que nos describe Yuri. Toda la tecnología y todos los adelantes serán completamente insuficientes para la especie humana si esta no rectifica sus pasos.
Motivo: ¿cúal era la causa de ese desastroso pasado? El sometimiento a las leyes de la naturaleza, y su jodida selección natural. ¿y cúal la del "maravilloso" presente? Pues, precisamente, que el avance científico y tecnológico nos han liberado del control de la naturaleza. La pregunta ahora es: ¿y quién controla al hombre, a partir de ahora? Si el hombre (la sociedad) no se controla a si mismo, la respuesta es clarísima, y nos la da cualquier ciencia sería, desde las matemáticas hasta la microbiología.
Y, os recuerdo: la tecnología no ha liberado al "hombre", sólo a unos pocos hombres. Toda la tecnología que ha permitido llevar a dos docenas de hombres a la luna no salvaron la vida a los 200.000 muertos del tsunami de hace unos años, o a los nosecuantitos de los terremotos recientes. El crecimiento esponencial y no controlado es lo que tiene.
Y si sigue dominando la sociedad las mismas fatídicas ideologías de los del "creced y multiplicaos", me rio yo de lo que pudo ser la edad media (con 300Millones de humanos), comparado con las aberraciones que nos puede deparar un futuro con 10 mil, 15 mil o más
Lástima que la diferencia solo podemos apreciarla un insignificante porcentaje de los pobladores del planeta... a costa del resto.
ResponderEliminarYuri ,urgente explícanos si esto que nos estàn diciendo puede ser cierto o un tremendo disparate.
ResponderEliminarAhora se difunde que el terremoto de CHILE ha corrido nuestro manto terraqueo:desde el sitio del epicentro hasta la ciudad de BUENOS AIRES HACIA EL OESTE.
También dicen que se cambiò la posiciòn del eje del planeta ,acortàndose el largo de los dìas.
Ana María:
ResponderEliminarEs cierto, y no pasa nada. :)
Ocurre con todos los grandes terremotos. Pero es sólo por unos centímetros. Cabría preocuparse si la cosa pasara a metros. ;)
Pero el pasado es una mierda solo porque hubo gente a la que no le consoló dicha idea. Si este artículo os despierta ese consuelo, malamente.
ResponderEliminarYuri ,a todos estos remezones que hacen sufrir tanto a los chilenos ,les he dedicado -para que se rian un rato-esta poesía por demàs casera inspirada en el traspaso de poder tan"sui generis" que han tenido.
ResponderEliminarLa pachamama chilena de nuevo està corcoveando.
Y a los pobres argentinos ya nos tiene bamboleando.
Será porque es femenina y prefiere a la MICHELA?
o será que es socialista
y no lo quiere a PIÑERA?
Me inspiró el hecho que estaba viendo el traspaso en TV CHILE y de golpe me siento mareada ,como con un ataque de presiòn .Menos mal que cortaron la trasmisiòn y la locutora informò que era réplica de 7.8 .Epicentro RANCAGUA.
Mi departamento en las alturas en BS AIRES se batiò bastante.Seguramente por la latitud.
Aclaro:pachamama es MADRE TIERRA EN QUECHUA.
corcoveando es encorvando el lomo el potro salvaje al ser jineteado.
de casualidad encontré este articulo y de verdad que me ha encantado. Lo pone a uno a pensar, y bastante. Solo vivimos criticando lo que no tenemos y lo malo que tenemos.
ResponderEliminarSaludos desde Medellín, Colombia.
simplemente...el arte...
ResponderEliminarhoy tenemos la posibilidad de crear teniendo acceso a la consciencia colectiva artistica del pasado del presente y cada vez más cercana al futuro. los medios de información a usarse son bastos para enriquesernos y las herramientas son infinitas para expresarnos.
hoy simplemente podemos escuchar musica creada en tiempos que hasta el siglo XX no se podia reproducir, a menos que se convocase a todos los integrantes necesarios para su ejeción, en un acto al cual no tenia acceso la gran mayoria de la población.
asi que amigos...relax...disfruten de sus ipod y no menos de sus fonolas... y aquellos que quieran aportar a la historia para ser recordados en el futuro como parte del pasado cual sembro las bases para un presente perfecto... solo tienen que hacer uso de las herramientas y crear.
El pasado era una mierda y si eras mujer más. Para muchas el presente sigue siéndolo. Los "occidentales" de hoy en día vivimos en un frágil paréntesis espacio-temporal de paz y relativa comodidad por el que tendremos que pelear si queremos mantenerlo. La nostalgia y la ñoñería son más peligrosas y dañinas de lo que parecen. Gracias por el artículo.
ResponderEliminarYuri solamente decir que es un articulo optimista escrito por alguien que vive bien y en un pais desarrollado. Todas esas cosas que destacas siguen en el mundo del siglo XXI solo tienes que mirar bien, por solo citar te digo que en Africa hay muy pocos viejos, hay malaria, y todas esas cosas. Derechos de la mujer?? el mundo musulman sigue aferrado a no cambiar, ect.
ResponderEliminarMe gustaría hacer una pequeña aportación a esta larga pero interesante discusión.
ResponderEliminarCreo que todos, sin excepción, estamos pecando en exceso de generalizar.
En primer lugar, Yuri, sinceramente, creo que con el título ya estás cometiendo un grave error. Aunque seguro que no te falta razón en muchas de las argumentaciones que das (seguro que muy bien documentadas; mis conocimientos de história son muy limitados, por tanto, no podría rebatirte nada de lo que dices), pienso que afirmar tan rotundamente que TODO EL PASADO ERA UNA MIERDA es una equivocación. De todo hubo y habrá, digo yo!
En segundo lugar, los que afirmáis todo lo contrario estáis cometiendo el mismo error.
Mi humilde opinión es que debemos ser capaces de analizar estas cosas sin caer en la tentadora red de la generalización.
Si tuviera que quedarme con alguna de las opiniones aquí vertidas estaría en la linea de El Hombre Gorrocóptero, Emilio Tejera o Neutravo.
A los que se les llena la boca diciendo que el mundo "moderno" y "evolucionado" actual es la bomba, les diría que abrieran un poco los ojos porque creo que pecan de cierta ignorancia. No hay que compararse con el pasado, está claro que en muchas cosas hemos mejorado ¡faltaba más!.
Pero, la primera cuestión que quiero plantear es: ¿todos vivimos mejor ahora? ¿Los 6000 millones de habitantes del planeta o solo los del Norte del planeta? Creo que hay unas desigualdades sangrantes en este mundo que algunos véis tan maravillo.
La segunda cuestión es el tema de la esclavitud. Antes existía la esclavitud... en realidad, una forma de esclavitud. Hoy en día sigue existiendo aunque de un modo más sutil, enmascarada diría yo. Si no mirad este vídeo: http://vimeo.com/8830217
(sigue en otro post)
(viene del post anterior)
ResponderEliminarEn cuanto al tema enfermedades. Sí, por supuesto, la higiene actual y la medicina ha mejorado este aspecto pero nos olvidamos de algunos detalles:
¿qué hay de las enfermedades que siguen acechando al tercer mundo? ¿Por qué no les preguntamos a ellos? ¿por qué para el 20% de la población la vida es tan fácil mientras el 80% restante las pasa canutas?
¿qué hay del SIDA? ¿qué hay del cáncer? ¿qué hay de los intereses de las farmacéuticas para que todo eso siga existiendo? ¿qué hay del negocio de las vacunas (ver Vacuna Gripe A)?... y un sinfín de barbaridades más.
Que sí, que sí, que en este mundo maravilloso se están primando intereses económicos por encima de los intereses verdaderos de toda la humanidad (y cuando digo toda me refiero a toda, no al mundo rico)...
Otras enfermedades del sigo XX y XXI: enfermedades psíquicas, depresiones (la gran epidemia del mundo moderno), alcoholismo, dogradicción, bulimia, anorexia, alergías ... Todas, posiblemente, provocadas por este mundo tan perfecto.
Un aspecto muy importante es que para que en el primer mundo vivamos tan bien, el mal llamado tercer mundo ha de estar bien jodido. Pero claro, eso no nos debe importar lo más mínimo.
En algún comentario, se ha hablado de la esclavitud y el sometimiento del pasado: hoy en día sigue existiendo... nosotros oprimimos al tercer mundo y los ricos nos oprimen a nosotros. Eso parece que no ha cambiado mucho con respecto a antaño.
Un último punto que me gustaría resaltar es que cada vez vivimos más alejados de quien de verdad nos da la vida: la naturaleza. Vivimos rodeados de hormigón, en una burbuja artificial, una falsa seguridad donde todo nos lo resuelve papá-estado. Si necesitamos algo, vamos al supermercado y lo tenemos fácilmente, sin preocuparnos de qué hay detrás de ese producto que acabamos de comprar. Además, cada vez nos convertimos en individuos más y más dependientes (en cierta manera, inútiles) del sistema. Si este falla, nos quedamos en bragas. Recuerdo la huelga de camioneros de hace 2 años: ¿qué hacemos si el supermercado se queda sin alimentos? ¿nuestro coche sin gasolina? Menudo sistema... tan fuerte y a la vez tan frágil, ¿no?
Concluyendo, para que sigamos creyendo que hoy en día todo está bien (y me da igual que ayer fuera mucho peor, lo importante es el presente) el sistema nos sigue adormeciendo, aborregando, nos sigue metiendo en vena la pastilla azul y nosotros seguimos negándonos a tomar la pastilla roja. A ver si abrimos los ojos de una vez!
Un abrazo.
¡Por que un mundo mejor es posible!
Verdaderamente ningún tiempo pasado fue mejor y el desarrollo social lejos de lo que se piensa es en realidad lento y sufrido aun ahora y el único retroceso es pensar en lo contrario, el terror al cambio es la principal tranca del progreso, las revoluciones transforman al mundo de una u otra forma y el futuro siempre traerá algo de bueno si cada vez nos centramos más en el ser humano como base de la sociedad y célula del mundo.
ResponderEliminarYo por eso digo, los 70's y 80's fueron geniales, no había tanto loquería como lo hay ahora, y las medicinas, formas de justicia, y algunas tecnologías ya estaba por acá, creo que ese fue un momento bueno :D
ResponderEliminarDe acuerdo Isa.
ResponderEliminarYo quiero ser también optimista. No tiene porqué ser así, de hecho no debería de ser así... pero por desgracia lo es. Está claro que hoy por hoy los grandes males del tercer mundo se deben en gran parte a la avaricia capitalista del primer mundo.
Y repito, el pasado será una mierda...comparado con nuestro mundo. Pero qué tal si se lo preguntamos al 80% restante de la población mundial.
El artículo peca un poquitín de falaz, lo que se llama un desfile de horrores:
ResponderEliminarhttp://es.wikipedia.org/wiki/Desfile_de_horrores
Además de que no habla de una sociedad en concreto sino de todos los horrores que ha podido encontrar por el camino, si yo me pusiera a buscar todas las cosas malas de la modernidad y la pusiese en un artículo seguro que quedaría muy guay y la gente aplaudiría.
Además de que muchas de sus afirmaciones ni se cita bibliografía ni nada ¿Qué los pueblos nómadas tenían inseguridad alimentaria? Le recomiendo a Marshall Sahlins y su "Economía en la edad de piedra" para que vea lo contrario. Y eso por no hablar de los insultos como lo de que las brujas "no tenían luces", oye Blog no tenían pero si eran tontas o no dudo que pueda juzgarlo alguien que ni las conocía.
A mí me parece que los que dicen que no hay tanta diferencia entre entonces y ahora es que, realmente, no se han enetrado bien de lo que había entonces.
ResponderEliminarComentaba un bloguero que la justicia de entonces era precida a la de ahora: útil par el poderoso pero inútil para el ciudadano. Pues perdón, pero no. Yo trabajo en la justicia y sé de lo que hablo, y las garantías procesales y judiciales que tiene un pobre o un ciudadano de a pie no la has ha tenido nadie en el apsado, ni siqueira los reyes. Lo único que está viciado hoy en día es el derecho administrativo (lo típico de tirar la parcelita ilegal del currante y paralizar el derribo de la del rico, cuando ambos han edificado en el mismo suelo rústico no urbanizable). Pero, en lo que se refiere a derecho civil, penal y laboral, la justicia es totalmente imparcial y satisfactoria, por muy pobre que sea una de las partes y muy rica que sea la otra. Hoy en día, si un empresario rico despide ilegalmente a un obrero, lo joden. Si un millonario mata a un mendigo o viola a una mujer marginal, lo joden. Si un hombre trata mal a su mujer y esta quiere divorciarse, se divorcia y encima se queda con una pensión suculenta. Y, encima, existe el turno de oficio, es decir, la justicia gratuita, por el cual todo el mundo puede ser representado y defendido por un abogado y un procurador, aunque no tenga un duro para pagarlos. Yo llevo muchos gitanos, inmigrantes, amas de casa y gente humilde en general a los que he presentado procesalemnte como procurador, y lo sigo haciendo, y es el Colegio de Procuradores el que me paga (una msieria, de hecho se le llama indemnización y no sueldo) por hacerlo.
Realmente, creo que lo que de verdad nos hace añorar tiempos pasados es, por una parte, la estética tan atrayente que había entonces (los estilos arquitectónicos, las pinturas, los vestidos, las capas...) por una parte, y los valores tan románticos (el valor, el honor, todo el rollo caballeresco) por la otra. Pero, seamos sinceros, lo que nos gusta de la antigüedad son los detalles, no el telón de fondo. A mí me encanta hacer recreacionismo y jugar a rol en vivo, pero cuando el juego termina agradezco muco volver a casa, con mi coche, mi teléfono, mis derechos humanos y mis garantias constitucionales.
Lo único que realmente vale la pena de entonces, quizás, es que había más naturaleza y menos contaminación, pero, seamos sinceros, los humanos explotaban todo lo que podían. Si no jorobaron la naturaleza más rápido fue porque no les dio tiempo. No hay más que ver cómo se comportaron los conquistadores de América en los siglos XVI y XVII con los paraísos tropicales y las tribus que vivían allí...
Bueno, vale: pero no había televisión, ergo las Belenes Estéban de la época se las ahorraban...
ResponderEliminarClaro, desde el punto de vista del que tiene acceso a internet, coche privado, medicina moderna y fast-food todo es maravilloso ahora y era una mierda antes. Para que en el primer mundo disfrutemos de un presente tan guay, el tercero (que son mayoría) debe estar explotado. DEBE estar explotado, y por eso lo está. Si dejara de estarlo nuestro sistema no se sostendría: ni energía, ni alimentación (lo de la seguridad alimentaria supongo que es una broma: nunca hemos estado peor), ni materias primas. El planeta da de si lo que da, y no hay para todos. Lo siento pero ni la ciencia ni la tecnología pueden cambiar esto. Una parte de la ciencia, la termodinámica, se encarga de demostrarlo. Los actualmente explotados estaban mejor en el paleolítico, con la misma mortalidad infantil pero sin misiles teledirigidos que masacran aldeas, y todos iguales y libres. Que les pregunten a ellos por la seguridad jurídica.
ResponderEliminarEste artículo es mentira para un 70% de la población mundial. ¿Sabéis cuanta gente en el mundo no disfruta de agua potable?
Con referencia a los comentarios sobre el Tercer Mundo que se han hecho a lo largo de este debate:
ResponderEliminarLo afirmado en el post sigue siendo cierto.
El acceso a agua potable segura está ya disponible para más del 75% de la humanidad, probablemente más del 85% en estos momentos.
En cualquier parte del mundo, con distinta disponibilidad y precio, se pueden encontrar fármacos.
No queda ni un solo país en el mundo -ni uno- donde la tasa de mortalidad infantil sea igual o superior a la media europea de hace 150 años. Apenas quedan países donde sea igual o superior a la media europea de hace 60 años.
Por no entrar en temas de libertades y derechos.
Y como eso, todo. El Tercer Mundo está muy mal y hay que seguir trabajando por él, pero de ahí a afirmar que "todo está igual" media un abismo. Un abismo de ignorancia. Y de excusas para no hacer nada porque "todo se queda igual", lo que es una absoluta falsedad.
Totalmente de acuerdo con Yuri. Os recomiendo (humildemente) bucear en gapminder:
ResponderEliminarhttp://www.gapminder.org/world
son estadisticas especaculares....
Y ver los videos de Hans Rosling en ted.com cuando explica el mito de los países en desarrollo.
Merece la pena dejarse caer por gapminder
Muy bueno el enlace, Dani. Muy didáctico.
ResponderEliminarYo no sé si el pasado era un mierda, pero de que olía a mierda no me caben dudas. Incluso en el siglo XIX hay descripciones de cómo Londres apestaba en verano por la contaminación del Támesis a consecuencia de las aguas fecales. Antes de la nuestra ha habido una treintena de civilizaciones urbanas. Todas ellas sucumbieron, en unos casos por la invasión militar de otras sociedades y, en otros, porque sencillamente suponía un hacinamiento de mugre y mierda. Si la nuestra está sobreviviendo es gracias a que hemos sabido aplicar el método científico para mejorar nuestra calidad de vida. Siendo un poco grosero y resumiendo este concepto: viajar al pasado y follarse a la tía más buena es la peor de las torturas.
ResponderEliminarLa condiciones precarias de vida del pasado siguen siendo precarias en muchos rinconces de nuestro planeta, es un hecho, pero es cada vez más la gente que puede darse una vida "no tan mala". Y los que se pueden dar una buena vida, viven 1000 veces mejor que los reyes de la antigüedad... es mi opinión :-)
ResponderEliminar¡Gracias por el post! Me encantó y lo recomendaré.
Explicas muy bien y muy claro lo que tantos pensamos, y lo que por desgracia tantísimos desconocen.
ResponderEliminarFelicidades por el artículo
ResponderEliminarMe resulta increíble que aun con tu argumentación basada en pruebas objetivas y conocidas por cualquiera que haya tenido un mínimo interés, haya gente que la califique como falacia, o bien insistan en lo idílico del pasado y pongan tus ejemplos como exageraciones o casos aislados.
ResponderEliminarPara Diego: respecto a los transportes públicos, eso sigue siendo inmensamente mejor a tener que recorrerte a pata toda la ciudad, sin calzada, posiblemente sin zapatos, cuidando de que no te tieren aguas fecales desde una ventanta, etc...
ResponderEliminarDe verdad macho...
Yuri, cásate conmigo!!! :)
ResponderEliminarInteresantes reflexiones las del articulo ...
ResponderEliminarY bueno, respecto a lo ser "turistas temporales", pues es perfectamente posible. Tan solo tienes que irte al corazon de Sierra Leona, Burkina o Niger y veras todo lo que describes: brutal indice de mortalidad infantil, desnutricion, enfermedades "erradicadas", ignorancia, supersticion, tirania ... vamos, todo el pack "del pasado", al completo.
En general, tiene usted bastante razón en este artículo. Sólo me gustaría hacer algunas puntualizaciones.
ResponderEliminarLa primera, que usted habla de "el pasado" como un concepto muy amplio. Eso es arriesgado, en mi opinión. Yo creo que, aunque el progreso social, económico y tecnológico humano nunca se ha detenido del todo, tampoco ha trazado una línea ascendente perfecta hasta nuestros días, e incluso yo me atrevería a hablar de épocas etapas "involutivas", como es el caso de la Edad Media europea, por oposición a una Antigüedad helenística en la que la vida, si bien estaba muy lejos de ser un caminito de rosas, a lo mejor no era tan penosa.
Por otro lado, ignoro si la cerveza tiene propiedades antisépticas, pero sí que es cierto que los griegos muy rara vez bebían agua sin diluir algo de vino en ella. Pero no por las propiedades antisépticas del alcohol, ya que éste es, en puridad, solamente bacteriostático. Lo que sí mata de verdad a los bichos es, curiosamente, el pigmento rojo de de las uvas. De hecho, mi antiguo profesor de griego, don Javier Negrete, expone en un libro suyo ("La gran aventura de los griegos") una teoría interesante acerca de por qué los soldados de Alejandro Magno tenían fama de ser demasiado aficionados al vino: probablemente se alcoholizaron al ser incapaces de beber el agua dudosamente salubre de los secarrales del Imperio Persa.
Publicado en unosyceros.aprendeprogramacion.net por su interés cultural, tagleado el blog ;)
ResponderEliminarGenial, llevo 3 horas leyendo artículos de este blog sin parar, Yuri, te has convertido en mi "heroe" :D
ResponderEliminarUn sáludo y sigue así
No estoy deacuerdo
ResponderEliminaryo creci en un pueblo pequenisimo en sur de rusia , teniamos agua, un jardin grande con todas sus cosechas,playa, arboles de avellana los vendiamos en el bazar, fruta de todo tipo
Soy de familia rusa-indigena , mi abuelo era adug (Adygea), este pueblo adug es de los mas antiguos de toda europa . Por sus genes o lo que sea nunca tubo problemas dentales conservo su dentadura hasta los 74 años, lo mismo que yo no tengo ni un problema dental, ni un caries ni nada.
Pero claro con una sola tele en que habia solo un canal o como dices de higiene , solo me lavaba una vez a la semana porque no te sientes sucio la verdad, vosotros no lo sabreis pero es verdad ... ni lavar los dientes ni nada , tampoco es que habia suciedad ahi ni olor desagradable ni nada, nose me sentia muy feliz. Sois gente de ciudad no sabeis eso de estar isolado de tantos problemas .. a veces pienso si esto es el problema del mundo de hoy, de que como nos apartamos mas y mas de la naturaleza, debilitamos a nuestros genes
claro estoy hablando de vida en pueblos, en una ciudad de edad media habia pis y mierda por todos lados, y de enfermedades milliones...
se me vino una idea , asi un poco tonta
ResponderEliminarme gustaria saber cuantos descendientes dejaron los de la ciudad y los del pueblo
haha seria muy gracioso si por ejemplo tu y demas aqui sois de familias de emigrantes del pueblo de hace dos siglos, y que paso con los de ciudad ? especialmente los pobres, enfermedades, hambre morian una por una las generaciones esas de la ciudad , por ejemplo del siglo 15 no quedan ni una pizca de descendientes de estos pobres
ves esta foto de la chica de arriba ... su cara.. sus genes gritan "soy de pueblo" XD
Toma ya¡ Hacía mucho tiempo que pensaba como tu Yuri, pero el debate me ha echo replantearmelo. En cualquiera de los casos enhorabuena por el artículo.
ResponderEliminar"El pasado era una mierda" en general es posible que sea demasiado genérico. ¿Para quién? Habría que aclarar. Si te comparas a ti mismo (te supongo habitante del primer mundo de clase media con atención sanitaria) con los campesinos de la edad media, los esclavos clásicos, las mujeres HOY en Irán, los enfermos por pestes, o con los pobladores de la edad de bronce,.....pues SI, estoy de acuerdo contigo. Vives mejor que ellos. Y, por ende, todos los que te leemos. Todos los que te leemos tenemos al menos un ordenador y una conexión a internet, con lo que podríamos decir que somos del mismo o parecido rango social. Genial, hoy, nosotros, en este lugar del mundo, vivimos mejor que la gente que describes. Sin duda.
Y, generalizando, tb estoy de acuerdo contigo. Por lo que se, no mucho, NUNCA ha habido TANTAS personas con acceso a salud, con derechos sociales, con alimentación asegurada, con posibilidad de expresarse…etc. Estoy casi convencido de que la humanidad en lineas generales ha avanzado para vivir mejor, porque somos así. Somos la caña¡ Incluso los que hoy creemos como retrocesos (edad media) es posible que no lo fueran tal y como pensamos.
Pero a la vez los pasos que hemos ido dando nos han traido problemas nuevos, hemos olvidado momentaneamente algo, o ha aumentado la desigualdad. La industrialización S XIX y la vida en la ciudad nos ha alejado, creo, que de nosotros mismos: de la naturaleza. Esto no quiere decir que vivir como hace 200 años sea la solución. El hiper-consumismo nos ha alejado de la felicidad. Esto no quiere decir que vivir del trueque sea la solución. …y una larga lista de cosas.
Esto nos puede hacer replantear que este modelo social no mola nada y que había aspectos del pasado que bien merece la pena recuperar. Como dicen algunos comentarios, para ser más felices.
Felicidades por el articulo, me ha gustado mucho!! Pero amigo ahora te toca buscar tiempo para hacer la segunda parte, además hay varios por aquí arriba que opinan igual.
ResponderEliminar"El pasado es una mierda y el futuro nunca es como se pensó"
A mi me llama la de aprender de nuestro pasado. "No tropezar dos veces con la misma piedra" y como el marketing suplanta nuestra felicidad.
Si no has visto aun "Binta y la gran idea" un corto de Javier Fesser te invito a que lo hagas.
Un placer leerle.
Un debate largo desde luego, lo que he visto comentar una y otra vez es que nos hemos alejado de la "naturaleza". Agradecería que aquellos que la han mencionado explicasen a que se refieren exactamente. Porque a mi me suena sospechosamente a ese lugar bucólico y pastoril que se sitúa en el pasado.
ResponderEliminarDesde el punto de vista biológico somos tan "naturaleza" como un árbol del monte, pero con cierta complejidad añadida. Formamos parte de una sociedad-colmena, por así decirlo, y eso nos permite prosperar como individuos y como especie. Sin las necesidades básicas cubiertas la evolución y desarrollo personal se me antojan difíciles, no es casualidad que los "hombres" griegos, pudieran desarrollar principios filosóficos complejos, ya que un nutrido ejército de esclavos cubría sus necesidades. Me parece más difícil lo contrario, que estando todo el día buscando tu alimento te pares a pensar en dioses o moléculas.
Respecto a la guerra, surge sin duda de la competencia por recursos, cuantos más seamos, menos recursos. Todos los seres vivos luchan por defender sus recursos, no hay excepciones. No hace falta inventarla.
Muchas gracias Yuri por tus escritos.
Al leer el post se me vine a la cabeza una canción de Maria Elena Walsh (una cantante y escritora argentina muy conocida) que dice:
ResponderEliminar"Quien no fue mujer
ni trabajador
piensa que el de ayer
fue un tiempo mejor" (Orquesta de señoritas)
Como resumen del post y las discusiones que se generaron me parece muy acertada la estrofa.
Realmente una excelente pagina, un abrazo desde Argentina
Buena entrada Yuri. Está claro que no todo el mundo tiene acceso a los mismos privilegios..pero el hecho de que podamos ser críticos con las infraestructuras incompletas de nuestro mundo significa que somos conscientes de que existe mucho margen de mejora.
ResponderEliminarEso, el ser conscientes de ello, también es una mejora importante, a mi entender. El hecho de ser capaces de imaginar sociedades todavía mejores también es algo que parece relativamente moderno (ilustrados? científicos?)
Una sociedad más armónica, más integrada en la naturaleza, es posible hoy en día. Podemos imaginarla, desarrollándose a partir de tecnologías renovables.
Quizás cualquier pasado fue mejor..para la naturaleza..y no para el hombre.
Once again, voy a hacer de abogado del diablo, partiendo de la base de que estoy completamente de acuerdo con Yuri en este artículo y considero su blog fabuloso. Creo que el artículo peca colateralmente de algo cotidiano en la historia que se estudia en occidente: está sesgado desde el punto de vista de la antigëdad clásica y la Edad Media europea. En África podríamos decir que en muchos aspectos aun no han salido del neolítico, y en extremo oriente desde el comienzo de nuestra era existieron sociedades muy avanzadas en lo científico-técnico.
ResponderEliminarHoy, algunos dicen que las brujas eran más sabias que el pueblo en general, porque sabían de hierbas medicinales...
Ni tan malos ni tan buenos. Evidentemente, hemos progresado en múltiples aspectos como la medicina, pero ni el pasado (según el período al que nos refiramos) fue tan oscuro ni vivimos hoy en el mejor de los mundos posibles. Incluso en calidad de vida, he visto un cierto descenso en los últimos años. También tenemos la inmensa suerte de vivir en el mundo desarrollado, gozamos de lujos que la mayor parte de la población del planeta no podrá disfrutar. Las desigualdades sociales no han hecho sino aumentar.
ResponderEliminarComo alguien comentó, las sociedades paleolíticas eran mucho más igualitarias que las de ahora. En cuanto a los mitos de determinados períodos caracterizados, supuestamente, por contínuas guerras y enfrentamientos bélicos, la mayoría de tales enfrentamientos no pasaban de meras escaramuzas... el período más belicista de la historia es precisamente el contemporáneo, cruel siglo XX, en guerras que ya no son meros enfrentamientos entre ejércitos, con quizás alguna operación de saqueo contra aldeas indefensas o de esclavización de la población sometida... son guerras, las actuales, en las que la mayoría de las víctimas son civiles, que son bombardeados desde un avión.
Ni cualquier tiempo pasado fue mejor, ni cualquier tiempo pasado fue peor. La frase correcta es:
Cualquier tiempo pasado fue anterior.
Estoy de acuerdo con tu artículo Yuri.Pero hay que matizar que no todo el mundo tiene acceso a los avances de la medicina, que en el famoso tercer mundo-creado por el primero-.vive gente que está todavía en el neolítico, que mueren por enfermedades que Europa ha erradicado.Por tanto, hay que seguir luchando para que los avances sean para todos, y no solo para una minoria.Nosotros tenemos mucha suerte, pero si viviéramos en Africa o en Etiopía realmente nuestro esperanza de viva seria muy diferente, y el hambre seria el "pan" de todos los días,
ResponderEliminarUna vez más: incluso en el peor pudridero del Tercer Mundo de hoy se vive mejor que en el corazón de Europa (o cualquier otro lugar) de hace 500 años. :-) Y no digamos de hace 5.000, o 50.000. Pero además, con diferencia: el pasado era un caso extremo de Tercer Mundo que hoy en día sólo vemos durante las semanas que dura una crisis en algún lugar verdaderamente malo.
ResponderEliminarhttp://www.gapminder.org/world
Y esto no es una llamada a la inacción, o a decir que "ya está todo bien", sino a seguir mejorando. Precisamente, porque funciona. Precisamente, porque podemos. Precisamente, porque no es ninguna utopía: somos la prueba.
Buenas, aquí un descendiente de indios reportando desde el tercer mundo. Recién llegado a mi choza montado en mi mula "Paquita" acabo de conectarme a la "internés" vía señales de humo, como todos hacemos acá. Mi fiel mono "Coco" me ayuda con los quehaceres de la choza. Interesantes afirmaciones, esas de nuevas medicinas en las que no hay chamanes como tenemos aquí que usan hierbas medicinales.
ResponderEliminarJeje, dejando de lado el sarcasmo, me hacen acordar a la señora del pastor de la serie Los Simpsons que siempre grita "Alguien pensó en los niños?". Acá sería "Alguien pensó en el tercer mundo?".
Mierda, no cambio ni un minuto de mi vida por vivir en el pasado. Ni siquiera porque vuelvan las costumbres de mis antepasados (salvo una, la manía que tenían los indios de bañarse todos los días y cuando transpiraban). Me cago en las costumbres antiguas, en las reivindicaciones de los ancestros y todas esas boludeces. Quiero vivir en un mundo moderno, con agua fría y caliente, con internet, con transportes públicos, con subterráneos, con tv lcd (aunque no tenga, ya va a llegar). Tengo una muy buena prepaga, un muy buen laburo. No tengo que andar cazando ni sembrando mi comida, cosa en la que no sirvo y me cagaría de hambre. Mierda, en un tiempo anterior no tendría oportunidades de vivir!
Excelente post Yuri, te lo dice un indio modernizado.
Yuri, en muchas cosas estoy de acuerdo, pero creo (humilde opinión) que eres incapaz de analizar el presente con el mismo parámetro con el que analizas el pasado. Me explico, dices: "Y quien sueñe en ser príncipe, rey o emperador del pasado, o incluso hombre o mujer libre, que calcule las probabilidades de haber nacido en tal condición."
ResponderEliminarCalcula las probabilidades que hay ahora de nacer y tener unas condiciones de vida dignas (Datos de la ONU de 2005: el 80% de la población mundial vive con el 20% de los recursos económicos y viceversa. Datos de 2010: nunca antes en la historia de la humanidad ha habido tantas personas que pasaran hambre, tanto a nivel absoluto como RELATIVO).
Efectivamente, el pasado era una mierda, como lo es el presente para los que no son unos privilegiados como tú y yo.
Creo que hay tres parámetros que se entrecruzan a la hora de dar al pasado y al presente su justa medida. Por un lado tenemos la felicidad, por otro las condiciones objetivas y por último la cohesión social y/o la distancia entre el primero y el último.
ResponderEliminarDe la primera decir que no se puede cuantificar y es difíciul de cualificar. La felicidad es algo bastante subjetivo e individual. Si lo que significa es conformidad con la vida que se tiene es indudable que en el pasado eran más felices. Actualmente existen más frustraciones porque no nos resignamos y queremos mejorar nuestras condiciones de vida, lo que me da pie a pasar al siguiente punto.
Las condiciones de vida han mejorado. Es innegable. Obviamente la gente se sigue muriendo, sigue habiendo lucha por los recursos, violencia territorial y debida a la jerarquía social, etc. Pero nuestras condiciones de vida —no las nuestras en cuanto a occidentales del "primer" mundo, sino en cuanto humanos— han mejorado ampliamente.
Por último llegamos a la cohesión social, a la distancia entre los que están mejor y los que están peor. La distancia entre los que están mejor y peor ha aumentado. Al tiempo, los que están peor hoy están mejor que los que estaban mejor ayer.
Por tanto y en resumen, la mención reiterada a la felicidad como parámetro no la creo positiva, esta no depende ni se debe al pasado o al presente sino a la disposición personal en gran medida y a la satisfacción de las necesidades —Maslow—. Intentar saber si hay más gente feliz antes que ahora o si era en proporción mayor o menor, no creo que sea positivo. La felicidad no es una dádiva que tenga que otorgar el Estado o el colectivo sino que nace del individuo y de que este desarrolle sus capacidades y se sienta pleno. Dudo que eso se pudiera hacer mejor antes que actualmente.
Al tiempo, el principio de Pareto es una constante que creo ver repetida en la historia, el matiz no está en que ahora haya más diferencias que antes entre pobres y ricos, la cuestión es que tanto si la riqueza total aumenta como si lo hace la población, al mantener la regla del 80-20, las diferencias se agravan. Ahora bien, más allá de las condiciones sanitarias, garantías jurídicas, tecnológias de acceso a la información y al conocimiento, democracia y derechos humanos, creo que el hecho diferencial por el que el presente es mejor que el pasado y el futuro —si antes no nos lo cargamos—, será mejor que el presente es las mayores posibilidades de progresar tanto a nivel personal como colectivo.
Si nos fijamos unicamente en la ciencia es obvio que estamos mejor que antes.
Y sin embargo si voy a hacer un matiz que creo que nadie ha hecho. En comparación con antes, hoy tenemos la capacidad, si no de destruir el mundo, si de destruirnos a nosotros. Es esto quizás, ese aumento de las opciones para hacer cosas buenas, lo que también nos da la capacidad de hacer cosas mucho peores a las que antes pensaron que se podrían llegar a hacer.
P.D.: Disculpas por el tochazo, pero era mi primer comentario en La pizarra. Felicidades por el blog.
Un gran mito es que la medicina ancestral o tradicional es mejor que la moderna, que si se basa en sabiduría antigua es mejor, por eso si saturno está en la casa de piscis y eres sagitario no debes operarte de fimosis con un cirujano acuario: astología médica, tradicional y con miles de años de demostraciones y pruebas. Lo próximo: la trepanación como curación de todos los males.
ResponderEliminarOtro mito es que todo lo natural es bueno aplicado a las terapias "naturales". En algún momento vivimos en un paraíso donde los leones y los corderos dormían juntos en paz y en cuanto nos hicimos humanos la cagamos. Todo lo artificial causa enfermedades, el deterioro de la tierra y los males del mundo.
Comentaba esto en mi blog;
http://rehabilitacionymedicinafisica.blogspot.com/2009/10/todo-lo-natural-el-bueno-o-la.html
Me encantaría que lo hicieras tú porque me encanta cómo escribes. ¿Te gusta el tema?
Muy buena entrada.
Yuri, con respeto y admiracion por tu blog en general, como puedes afirmar que "incluso en el peor pudridero del Tercer Mundo de hoy se vive mejor que en el corazón de Europa (o cualquier otro lugar) de hace 500 años"?
ResponderEliminarQue hemos avanzado en ciencia, medicina, justicia... si. Que hemos avanzado en capacidad de destruccion, en nuevas enfermedades, en desigualdades sociales... tambien.
Si hubieras nacido en el pasado pensarias acorde a patrones pasados tambien. Y las proporciones se mantienen, en tanto que especie animal somos...
Y aun siendo totalmente cierto que probablemente las condiciones de vida de la clase media, y alta, del primer mundo actual, no tengan parangon con tiempo preterito alguno, en terminos de bienestar y confort, discrepo en ese radical punto de visto.
Yuri, hace 500 años dices? prefiero la vida de cortesano de Carlos V a ser mujer en Afganistan, niño de la guerra en Mozambique o esclavo en una factoria de Nike en Indonesia.
No crees?
Me has subido la moral xD
ResponderEliminarUn artículo genial, me ha encantado.
Lo siento, pero el artículo mezcla churras con merinas, unas épocas con otras y está lleno de prejuicios etnocentristas para hacer encajar las piezas de un rompecabezas ideológico que toma partido de antemano.
ResponderEliminarY no me parece particularmente progresista la opción que toma aquí el autor, lamento discrepar.
Ni todo era peor antes, ni todo es mejor ahora.
Depende.
Y sobre todo, depende de dónde, cuándo, cómo y para quién, pero ésa es otra historia, y no puedo reproducir aquí mi tesis doctoral.
Saludos antropológicos.
Muy bueno el planteamiento. Quizá en ocasiones algo cómico, y tratando de seer más cercano.
ResponderEliminarEs cierto lo que propone, la evolución nos ha traido una vida mejor, y ademas vivos, y sin enfermedades, y miserias.
HAce unos años visite un cementerio de Carabanchel. Me llamo la atención la zona dedicada solo a bebes, y niños hsata cinco años. Era gigantesco. Había enterramientos de finales del XIX, a 1930. Todo niños que morian de forma rápida, y gigantesca.
Para mi sin duda alguna lo mejor que tenemos siempre es el presente por no decir que es lo unico que tenemos a cada momento.Ahora bien,nuestro presente esta construido con nuestro pasado y lo llevamos a cuestas escrito en cada gen y en cada celula de nuestro cuerpo.Si ahora aplicamos la matematica de que todo lo pasado ha sido malo y esto lo llevamos con nosotros,¿como puede ser bueno nuestro presente?No os parece que en nuestra evolución tambien llevamos cosas buenas del pasado?
ResponderEliminarTambien se habla de medicinas y antes no,pero porque ahora tan evolucionados les roban descaradamente a tribus indigenas conocimientos milenarios de plantas curativas para patentarlas y forrarse a cuenta?
Desde luego creo que todo tiene su cara y su cruz.Saludos
Absolutamente de acuerdo. Sin embargo hay que aceptar que existen en la actualidad personas (por lo general en el poder de nuestras naciones) que parecen sacadas de ese relato, con una capacidad intelectual solo suficiente para utilizar las bondades de nuestra época para mal. La mayoría de la población del planeta aun es incapaz de adaptarse a este mundo, personas que no pertenecen a la civilización que necesita la actualidad.
ResponderEliminarOtro punto importante es que los culpables del pasado no eran otros que nosotros mismos, la naturaleza es como es y su actual destrucción (precisamente por esta multitud ignorante) es injustificable. Mal que bien dependemos de ella y no existe manera, por muy adelantados que estemos en Ciencia y Tecnología, de que exista un futuro sin nuestra madre naturaleza. ¿Grandes ciudades? sí. ¿Destruir la naturaleza para hacerlas? eso es estupidez e ignorancia.
magnifico!
ResponderEliminary otro apunte: la posibilidad de comer carne todos los días? aunque sea un mendigo, por pocos euros puede comer una hamburguesa. Qué se lo digan al Lazarillo de Tormes q se moría por unas uvas
En respuesta a Gorrocopteomán sobre la falta libertad de moverse ahora en comparación con la edad media... UN COJÓN DE PATO!!
ResponderEliminarEn la edad media los campesinos estaban ligados a la tierra y al señor feudal. Simplemente no podían irse, teninan que permanecer y cultivar la tierra. Y eso mismo era válido para el señor feudal, no podía pirarse para dedicarse a la cria del percebe, ni vender la tierra, mas de un noble podría estar perfectamente arruinado a pesar de los diezmos de los pobres.
Los ciudadanos de las ciudades si eran "ciudadanos libres" que podían dedicarse a los oficios con alguna libertad (tenian que pertenecer a gremios porque no es plan de chafarle la guitarra al resto, etc...), algunos sin impuestos, etc. Con las consecuencias de vivir en una ciudad (condiciones insalubres, falta de sustento en caso de hambrunas y libertad de que algún noble de turno te pegue un palo por las razones mas peregrinas, seguridad jurídica por los cojones).
Quien podía irse al monte y montarse una casa? Pues puede que los romanos cuando llegaban a terreno no conquistado previamente, cuando se llegaba a tierras virgenes en América... de las que tenias que cuidarte tú que no te las quitaran, mataran a tu familia, etc... Por lo demás lo mas normal era que todas las zonas cultivables o fértiles estubieran en manos de alguien que mandara, para abrir nuevas zonas, aparte de pedir permiso, obviamente, hacia falta una taréa titánica para arrancar arboles y piedras, nivelar el terreno, lograr llevar agua, conseguir semillas y abono, dar la parte de lo producido al señor...
Nada, la pérdida de libertad es antiquisima, desde que se podía forzar a alguien para hacer algo. Que por aquella época las cosas eran mas igualitarias? Si, todos vivian fatal, sólo que algunos un poco mejor.
Por su interés, añado este comentario que me ha remitido Vicente H. A. al correo electrónico:
ResponderEliminar"Quería responder a los que defienden de que en el campo "libremente" se vivía mucho mejor.
En mi pueblo en el Pirineo se ha pasado en 3 generaciones desde algo poco mejor que la edad media hasta la modernidad actual.
Antes no había ni camino para llegar al pueblo, sólo una senda para caballerías.
No había electricidad ni agua corriente. Las mujeres iban corriendo a la fuente antes de que pasara algún rebaño, a coger agua. La fuente curiosamente se llama "fuente de las fiebres".
En lugar de cuarto de baño tenías un monton de paja.
En cuanto a que había más "libertad", sin seguridad social, la gente tenía hijos sin talento, para que al hacerse mayores les cuidaran. Tenían terror a irse al hospicio. Dependes de una comunidad pequeña en la que todo el mundo te conoce y "te controla".
Sobre la salud:
Te echaban la bronca si corrías, o si te ponías en corriente de aire, porque podías coger una pulmonía y daban por hecho que si la cogías palmabas.
Bañarse en el río también te costaba una bronca por lo mismo.
De un simple golpe fuerte podías morir tranquilamente, por que no te llevaban al médico.
No tenían dinero y solo iba el cabeza de familia por ejemplo, que si se muere toda la familia está fastidiada.
Si te haces una lesión en la mano por ejemplo es fácil que con los apaños caseros o del curandero se te quedara deforme.
Las plantas medicinales las conocían bastante, pero como remedio eran bastante malos comparados con la medicina actual.
En tiempos de mi abuelo si no podías aguantar el dolor de muelas te atabas un cordel a la muela y a una puerta y hala..
Todos tenían los dientes podridos incluso al llegar a la adolescencia.
Los animales domésticos vivían en casa o el corral formaba parte de ésta.
Los crios llevaban un pantalon roto por detrás sin ropa interior hasta alcanzar una determinada edad.
Los matrimonios eran por conveniencia, con "aponderador", dote, etc.
Si una moza se quedaba embarazada y el otro no se casaba, la podían echar sus padres de casa.
La justicia era generalmente ir con el garrote a sacudirle al que te ha hecho tal cosa, ha pastado en tu campo, etc.
No había calefacción en casa, todos alrededor de una hoguera, y un aislamiento termico malo en las habitaciones. Las casas tenían tierra por suelo.
No había coches ni tractores, en su lugar mulos y burros, que eran difíciles de manejar, a veces daban coces, y consumían parte de la cosecha en grano.
En cuanto a que podias obtener lo que quieras en el campo, ojo como le toques el campo del otro, que está en la misma situación que tú...
Además segando con hoz y picando con azada la productividad es ridícula, lo que lleva a mucho trabajo para estar mal alimentado.
El pasado, e incluso el pasado reciente, es una mierda pinchada en un palo.
Lo cual no quita que sea válido protestar para mejorar lo presente, o para que no nos recorten, como está pasando ahora."